Sophia siguió a su hermana en silencio, mientras atravesaba los pasillos del palacio, miles de recuerdos inundaron su mente, ese era su hogar, al cual siempre deseó regresar, pero que por miedo nunca regresó. Cuando llegaron al jardín, Sophia miró todo a su alrededor con los ojos muy abiertos, brillantes de emoción, aquel jardín estaba lleno de coloridas flores, había un pequeño quiosco en el medio del cual descolgaba enredaderas que tenían un cientos de pequeñas flores azules. El sol había empezado a ocultarse, una cálida y suave luz dorada bañaba el jardín haciendo que se viera aun mas hermoso. _ Este lugar sigue exactamente igual a aquel día que deje Arkala. _ Este era tu jardín favorito, por eso pedí que cuidaran de él, quería que cuando volvieras pudieras disfrutar de tu jardín. _