Mirando por encima del hombro, me encontré mirando a Britt Heatherton, una de mis clientes habituales en Stanton Family Market. Tenía una voz notoriamente aguda y una reputación poco favorable entre los camareros. Por lo general, venía para almuerzos energéticos vestida de pies a cabeza con ropa Tory Burch, pero esta noche llevaba un hermoso vestido verde menta que me recordó que había venido aquí con mezclilla descolorida y una camiseta con el logo de la langosta de mi café. la mama.
—Oh, Dios mío, es muy divertido verte aquí de todos los lugares—, alardeó Britt, inclinándose para besar mi mejilla. —¿Estás atendiendo algún evento? ¿Conociste a mi mejor amiga Andre Evans? ¿No es simplemente divina? preguntó ella, bailando alrededor de su lado de la mesa.
Mis ojos parpadearon cuando Britt
