—¿Qué hiciste?—era Susy arrastrando el cuerpo de una niña, ella me ve petrificada sin decir nada
—Susy........—me interrumpe
—¿Tú que haces aquí?—¿cómo se atreve a preguntarme eso? Es más que obvio el porqué estoy aquí, este es mi refugio, mi hogar
—Pues porque aquí vivo Susy, ahora tú dime, ¿qué haces con esta niña? Tú aquí no vives—ella baja la mirada e intento acercarme y retrocede
—No te importa, ahora déjame en paz—ella sigue arrastrando a la pequeña, no sé si esté muerta o viva
—Susy, deja de esforzarte así, le hará daño a nuestro hijo—me acerco a ella
—¿Y ahora te preocupas? Ja, ja, no me hagas reír—me está enfadando su carácter de niña, no quiero perder el control, en su estado pueden pasar muchas cosas, pero no estoy tolerando su caracter
—Ya basta Susy, deja de portarte como una niña—me estoy impacientando
—Tú no me vas a venir a decir que........—me acerque a sus labios, la bese y ella se aleja de mí tocando sus labios—¿Qué te pasa? No vuelvas hacer eso, o si no.....—la interrumpo
—¿O si no qué?—juguemos a la seducción, moria por besarla, sentir sus carnosos labios
—Lo....... lo vas a lamentar—ella se puso nerviosa y desviaba la mirada, está funcionando
—Me arriesgaré—de nuevo me acerque a ella y la bese en los labios, sujetándola por la cintura, solo aquel hermoso vientre abultado me impedía sentir más de cerca su piel
—Dije que no lo hicieras—se quita y levanta la mano para estrellarla en mi mejilla, pero la tome rápidamente
—Admítelo Susy Bradley, quieres esto...sé que lo anhelas—paso mi mano en su mejilla, rozando mis dedos en su mejilla, ella me ve a los ojos y los cierra
—¿Por qué te fuiste de esa manera?—solloza y la tomó de ambas mejillas, cambio a mi forma humana
—Lo siento mucho—ella levanta la mirada
—Eso no basta—sigue llorando—Ryan habló hoy conmigo y no sé porque demonios me pidió que hablará contigo, yo me negué y lo trate mal—pobre Ryan, él era el menos indicado en salir afectado
—Yo sé que no es suficiente, pero por favor, te pido que me escuches, yo......yo acudí a el para qué hablará, ya que........—me interrumpe
—¿En serio eso le pediste a Ryan?—me ve incrédula y yo asiento
—Entonces, ¿me dejarás explicarte?—la veo a los ojos y ella suelta un bufido
—De acuerdo—estoy feliz que al fin se dignó
Ella como pudo se sentó en el piso, yo permanecí parado caminando de un lado a otro mientras le contaba lo sucedido. Ella se quedaba quieta, solo oía todo con mucha atención y sus lágrimas de nuevo se hicieron presentes, a ella si pude decirle las cosas con más detalle, ella sabe lo que paso con Danna. Al terminar me acerco a ella, me hinque para quedar a la altura de ella, tiene la mirada baja y no me ve, no sé si en verdad me cree, tomó sus manos y no hace intento de quitar las mías
—¿Y bien?—estoy impaciente en saber qué piensa, levanta la mirada
—Es impresionante todo lo que te paso, estos cinco meses, yo.... yo no imaginé que tú.......—la interrumpí
—Sé que pase por muchas cosas y no sabes lo afectado que estoy por abandonarte todo este tiempo, no pensé que esto fuera a pasar, perdóname Susy—bajo la mirada y comienzo a llorar, siento sus manos levantar mi mentón
—Me hiciste mucha falta, han pasado muchas cosas durante el embarazo, mis deseos de matar gente, comer carne y beber sangre han aumentado, no sé cómo parar—ella dice afligida
—Podremos solucionar eso, yo me encargo, pero antes de todo, ¿quiero saber si me perdonas?—la veo a los ojos y ella sostiene la mirada
—Claro que te perdono, no podría vivir sin ti, el bebé te necesita y yo también—sonríe tan bella, extrañaba ver su sonrisa
—Susy, no sabes la felicidad que siento, ahora nada ni nadie nos va a separar, te prometo ser el mejor padre para nuestro hijo—la abrazo emocionado
—Te amo Beck—ella laza la mirada hacia mí, me mira con tanto amor, esa mirada me mata, me pone idiota
—Yo aún más—beso sus labios y ella corresponde
—¿Y ya sabes que será nuestro bebé?—limpio sus lágrimas, mirando el vientre
—No, yo quise esperar hasta que naciera, ¿tú eso quieres?—yo asiento
—Pero quiero verlo, hay que ir al hospital y que te hagan un ultrasonido, ¿que dices?—digo feliz y ella asiente, de nuevo beso sus labios
—Sabes, durante las noches sentía que tocaban mi vientre, por un momento pensé que eras tú—acaricia su vientre, no puedo decirle que si era yo, ya que se enfadaría
—Quiero tocar y sentir a mi pequeño—bajo mi mano a su vientre y acercó mi rostro para besar su panza—Mi bebé, mi dulce bebé, aquí está tu papá hijo—digo en susurros, pero siento algo—Él........ el bebé, que...... que.....—no sé que más decir y ella tapa su boca emocionada
—Se está moviendo Beck, por primera vez se movió—qué alegría, pude sentir a mi bebé
Ambos estábamos felices, mi bebé se movió y sabe que soy su padre, estoy realmente conmovido al sentir a mi hijo moverse, deseo verlo ya. Ella seguía sentada y yo reposaba mi cabeza en su vientre mientras tocaba su panza, ella acariciaba mi cabello, extrañaba estar así, juntos sin importar nada. Ya era tarde, decidimos salir, caminábamos por los túneles, hacia la salida, pero escuchamos ruido, eran ruidos cercanos
—Es la policía, sabemos que están aquí—¿qué mierda? ¿Pero qué está pasando?