Lucían. Mire a lo lejos que Jace estaba muy borracho, no dejaría que bebiera más, podría cometer una tontería, camine hacia dónde se encontraba para observar cómo se tomaba una botella completa de whisky. -Que onda señor Rice. - me dijo mientras azotaba la botella contra el suelo. -Vamos a casa Jace, bebiste demasiado. - lo tome del brazo. -No se preocupe por mi Lucían, estaré bien, además debe de cuidar a su hija. -También es mi obligación cuidarte. - lo guíe hasta la salida.-Oscar llévate a Míriam y a la bebe a la casa, me encargaré de Jace. -Dame las llaves Jace, te llevaré a mi casa para que no cometas otra pendejada. Sin responder Jace me extendió las llaves de su auto, nos metimos dentro y empecé a conducir en dirección a mi casa. -Gracias por traerme. - Jace no podía hablar