Miriam. Le había prometido a Jace que viviría con él, siempre y cuando encontrará un lugar muy cómodo para que Grace estuviera feliz. Los días después de la última vez que había charlado con Jace al respecto de irnos a vivir juntos, no cambiaron mucho, diario venía a visitar a su hija y siempre se quedaba hasta que se dormía, mi padre le gustaba estar con él, William estaba de luna de miel y no sabíamos cuando regresaría, pero estaba más nerviosa de lo normal, la simple idea de saber que muy pronto me iría con Jace me atormentaba, aún no quería tener sexo con él, lo seguía amando pero no estaba preparada para entregarme una vez más. Jace me comentó que vendría a hablar con mi padre y con todos nosotros sobre un tema muy importante, no sabía que era pero me moría de la curiosidad. Escuch