Después de lo sucedido con Jace salí de la casa y camine hasta la playa, me acomode en un camastro vacío y me coloque bloqueador en todo mi cuerpo, disfrutaba de la vista al mar, pero de pronto llegó a mi un recuerdo, los ojos de Jace tenían el mismo color azul intenso del mar, me agradaba mucho el color que tenían y a pesar que aún no lo conocía del todo sabía que muy en el fondo de su corazón era un buen hombre. Recordé la forma en la que me había tomado por la cintura y algo dentro de mi se empezó a encender, no quería pensar mucho en aquella cosa que sentí en mi ombligo pero lo cierto era que me gustaba la idea de que tuviera un m*****o grande, quizás sería porque aún era como una chica indefensa que quiere comerse al mundo a mordidas, bueno no al mundo, sino a Jace, me encantaba ese