Era el día. Temprano por la mañana Alexa desayunó algo ligero, se metió al baño y alistó su ropa. En ese último mes su guardarropa sufrió muchos cambios, dejó la mezclilla y empezó a usar pantalones de tela gruesa que se ajustaban a la cintura con elástico, dejó el cabello suelto para usar una coleta alta, cambió sus botas por tenis para correr y entendió por qué Dominick siempre tenía una mochila, una botella de agua, bocadillos, cuerdas y una pala, ella también estaba acumulando una gran cantidad de objetos e instrumentos que parecían inútiles y que eran extremadamente necesarios – lista – anunció al llegar a la sala, Dominick terminaba de empacar, recogió la mochila y la subió a la camioneta. Como siempre, Alexa tomó su celular para buscar una lista de reproducción y descargarla. –