ONCE Caitlin advirtió que la velocidad disminuía de nuevo y que comenzaban a bajar. Abrió los ojos pero no pudo reconocer ninguno de los edificios que veía abajo. Le dio la impresión de que estaban en la zona norte, tal vez en algún lugar del Bronx. Al descender volaron sobre un pequeño parque. A Caitlin le pareció ver un castillo a lo lejos. Cuando se acercaron más, se dio cuenta de que, efectivamente, se trataba de un castillo. ¿Pero qué hacía ahí en la ciudad de Nueva York? Caitlin hurgó en su mente y de pronto se percató de que ya había visto aquel edificio antes. Fue en una postal, en algún lugar… Sí, era una especie de museo o algo así. Conforme bajaban por la pequeña colina y volaban sobre los terraplenes y los pequeños muros medievales por fin lo recordó: eran los Claustros. Se