Curando mi corazón (1)

Consecuencias

Llegaron los primeros rayos de sol y con ellos mi entrada en razón, como doctora sabía que los excesos son perjudiciales, y justo anoche incurrí en excesos, sin duda alguna fue algo que nunca olvidaría, me dolía todo el cuerpo, más que todo mi entrepierna, tenía la leve sensación de no poder caminar correctamente por algunos días, sin contar con el hecho que no recordaba si nos habíamos cuidado, aunque en mi caso no era necesario pues según unos análisis que me realice un tiempo atrás cuando tenía la maravillosa idea de tener un bebe por medio de un donador de esperma, me dijeron que yo era infértil, lo que se traduce en pocas palabras a una casi esterilidad, debía ser algo sumamente extraordinario para que yo conciba.

Me levante de la cama, pues debía llegar a mi hotel pues en unas pocas horas saldría mi vuelo, yo tenía que realizar un proyecto en un lugar de la selva amazónica y por tal motivo me iba a ausentar por al menos tres meses de mi país, me quedaba la pena de no poder asistir a la boda de una de mis mejores amigas, por eso excedí a acompañarlas a la noche de farra, que para mí termino en más que farra.

Sé que en estos casos mi reputación no se dañara, pues él también es médico y si algo tengo claro es que entre colegas no nos haremos la maldad de andar diciendo los deslices que cometemos, o como muchos lo llaman las aventuras.

Ya con mi ropa puesta, tomé mi cartera que estaba botada por una parte de la habitación hermosa del hotel a donde me trajo, sin hacer mayor ruido salí de la habitación pues el al parecer estaba excesivamente cansado o de plano tiene el sueño muy pesado porque aún dormía.

En la habitación de hotel donde yo me hospede, no había mucho que recoger pues casi no saque nada de la maleta de mano que cargo conmigo, ya en mi ciudad me espera el hombre de confianza de papá quien se encargó de pedirle a la ama de llaves que hiciera una maleta con lo indispensable para mi viaje, mis padres me enviarían algunas cosas las semanas siguientes, según como las fuera necesitando, pero por lo pronto no llevaba grandes maletas, porque después se me haría difícil andar de aquí para allá con tanta maletería.

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[…]            Santiago Roosevelt

Después de una noche tan intensa como la que tuvimos, uno queda verdaderamente cansado, desperté hace unos minutos y para mi sorpresa lo hice solo, pues en la habitación no hay rastros de ella, una de las mujeres más sexys entregada a la pasión, no puedo olvidar su mirada de lujuria cuando llegaba al clímax, y como lo hizo algunas veces, sin contar sé que fueron muchas, porque yo estuve en la misma situación, en mis 30 años ya de vida no había tenido una noche como la de anoche, lo único malo fue que no le pregunte su nombre, pero a uno de mis amigos se lo preguntare.

Me dirijo al baño a tomar una ducha y me pare frente al espejo, y pude notar la gran cantidad de marcas que me dejo en la piel, pero me imagino que ella también debe tener más de una, entre todas las cosas caigo en cuenta que no nos cuidamos en ningún momento, aunque sé que es doctora y quizá ella prevenga estas cosas, pero para ser sinceros a cualquier hombre le gustaría tener un hijo con semejante monumento de mujer.

Salí del hotel a encontrarme con mis amigos, puesto que el día de hoy iríamos de excursión a un lugar muy bonito según me han contado, en ese viaje aprovechare y averiguare acerca de la bella mujer de anoche, Irvin mi mejor amigo fue el primero en llegar al punto de encuentro, Luis estaba aun con los efectos del tequila de anoche y en cuanto a Silver esta aun entre las piernas de su rubia.

-       Irvin, ¿Cómo se llama la amiga de tu novia?

-       ¿Mayra Castelli? ¿ella?

-       También es cardióloga, ¿verdad?

-       Si, ella es una de las mejores de la ciudad. Tiene su propia clínica cardiológica.

-       Dijiste, ¿Castelli? ¿Es familia de los Castelli que tienen diferentes empresas?

-       Así es, pero ella ha salido sola adelante, inclusive hace unos años atrás sufrió mucho por una persona, según me contó Karina, al novio lo mataron el día que se iban a casar, pero era porque andaba con personas peligrosas, además que la engañaba, a la pobre le toco fuerte.

-       Uy que feo todo lo que me cuentas, debió sin duda alguna ser algo terrible.

-       Bueno, y a todas estas, ¿Por qué la pregunta? Pensé que anoche que estaban tomando los tragos juntos se habían conocido un poco más.

-       Que te puedo decir, si hablamos, pero con todo el ruido de la música no recordaba que ella me haya dicho su nombre. ¿vive cerca de tu novia?

-       Pues sí, pero el detalle parte en que ella se fue a un proyecto que tiene ya hace algún tiempo, y no volverá creo que en el lapso de unos tres a cuatro meses.

-       En serio, que pena que no estará para tu matrimonio.

-       Una verdadera lástima, y ¿sabías que ella también cumplió años ayer?

-       No, no lo sabía, ella no me lo menciono cuando hablamos.

-       Ella ayer cumplió 33 años. Yo creo que ustedes se hubieran entendido muy bien, aunque ella es unos años mayor que tú, por lo que he conversado sobre ella con Karina y con lo que te conozco a ti, podría decir que tienen la misma filosofía del amor.

-       Tú sabes mi opinión sobre ese tema, mejor dejémoslo así nomás.

Los días continuaron como si nada, entre conversaciones y uno que otro chiste entre amigos, fue llegando el momento, la hora de volver a nuestra casa, las mini vacaciones se habían terminado, la rutina nos llamaba, lo único que me tenía un poco confundido era que no salía de mi mente ella, Mayra Castelli, coincidentemente ella es hija de la dueña de la agencia donde la mala mujer trabajaba, creo que escuchar ese apellido me trajo recuerdos un poco amargos.