— ¿¡Qué quiere con ella!? — Rafael Arcángel va y viene por el lugar, a su alrededor solo puede verse una sala antigua cuyo techo no existe y hay paso a un millar de constelaciones de diversos colores, los muros del lugar destilan luz propia, cálida, agradable. — Nada importante, busca tentar la ira de nuestro Padre atacando a su hija más pequeña. — Amenadiel suspira pesadamente. — Parece tener curiosidad sobre la misión de la chica, lamentablemente ni nosotros podemos calmar esa ansiedad que se presenta en él. — Hablas como si defendieras su comportamiento — Cassiel farfulla molesto desde el otro extremo de la habitación. — No lo defiendo, entiendo su comportamiento, sabes que actúa como si fuera un niño — rueda los ojos. — Eso es descabellado, el hecho de pensar que tú qui