Para la cena importante con los empresarios de Eslovaquia, Bet optó por un look elegante y sofisticado. Lucía un deslumbrante vestido rojo que resaltaba su figura esbelta y femenina. El vestido era de corte ajustado, con mangas largas y un escote sutil pero favorecedor. El diseño destacaba con hermosos detalles de encaje en el escote y una falda fluida que caía hasta la altura de sus rodillas. Bet complementó su atuendo con unos zapatos de salón a juego con el vestido. Eran de tacón alto y elegantes, con un acabado satinado que realzaba su elegancia. Las joyas que lucía eran discretas pero divinas: unos pequeños y brillantes pendientes de diamantes y un delicado collar de perlas que adornaba su cuello con sofisticación. Para el peinado, Bet optó por llevar su corto cabello castaño suelto