Derek ya no quiere esperar más para ser padre. Lleva a Leah rápidamente a ver al doctor Hamilton, quién estaba presto para de una vez realizar el procedimiento. —Buen día, ya está todo listo para comenzar a trabajar en Leah—apunta el doctor bosquejando una sonrisa. —¿Me va doler doctor? Es que yo soy.... —Descuida ya Derek converso conmigo—mira Leah a Derek con rareza y se va muy nerviosa al laboratorio. En la camilla Leah parpadea muy acongojada, sus trémulos pensamientos se apoderan de ella instantáneamente. Sin embargo, no se puede echar para atrás, continúa firmemente y cierra, por unos segundos sus hermosos ojos, sosteniendo sus manos y llevándolas hasta su pecho. Al cabo de unos minutos, el procedimiento está listo. Y el doctor le indica: —Listo Leah esperamos los resultados.