Amber cruzó las puertas del vestíbulo, saludó con cordialidad al encargado de la recepción y también portero del edificio y caminó rumbo al ascensor, sus pasos eran lentos, tanto como podía trataba de disimular el dolor en sus muslos que seguramente seguían enrojecidos y presionó el botón con el número 6 que la llevaba al departamento de Dereck. Amber tocó el pequeño timbre del departamento y casi enseguida salió su amigo a recibirla, Dereck sonrió al verla y se movió hacia a un lado para que Amber pudiera ingresar. —Hola— saludó Amber a Natalia en cuanto la vio sentada sobre un banco alto frente a la plancha en la cocina, el departamento de Dereck era un espacio abierto y aquella plancha era lo único que dividía a la cocina de su sala, el lugar en sí era muy amplio y hermoso, pues Derec