feliz día de los enamorados
Una noche de febrero, justamente un 14; día de los enamorados, se encontraba Emily torres en un bar, triste y por supuesto despechada.
-Deme la bebida mas fuerte que tenga-le grito al mozo entre lágrimas.
El mozo la miro con lastima, pero sin decir alguna palabra le preparo su bebida.
- ¿Se puede saber porque tan triste? -le pregunto el mozo mientras le colocaba la bebida ya lista frente a ella.
-Mi prometido me abandono-Empezó a decir-Hoy celebraríamos nuestro día, cuando llegue a casa me lleve la sorpresa de verlo besándose con mi prima, la estúpida esta embarazada de el y se casaron el mes que viene-le termino de explicar Emily con una sonrisa fugaz.
-Ya veo-suspiro el modo.
-Lo peor fue cuando le pedí explicación, me dijo que aun me amaba, que podía seguir siendo su novia-tomo la bebida y la bebió toda de un sorbo-en pocas palabras me dijo que fuese su amante.
- ¿Y qué le dijiste? -pregunto aquel chico muy interesado por la vida de aquella chica.
-Con mi paraguas le pegue en su entrepierna, luego Sali corriendo y aquí estoy-le contesto Emily mientras veía su copa vacía
-Tengo mucha curiosidad en saber ¿Qué tiene ella que no tengas tu?
-Dinero-contesto Emily sin pensarlo-Es la mayor sucesora de la tienda de joyas que posee mi familia.
-Entonces se metió con ella por interés, estúpido pero muy inteligente de su parte-Emily lo miro mal.
-No lo halagos-bufo ella.
-No se porque estas enojada, eres una mujer bellísima-le halago el mientras le servía otra copa.
Aunque aquel chico lo decía en tono de broma, no mintió.
Emily era una chica de color de piel blanca, cabello n***o y muy largo, a pesar de tener rasgos muy notables y hermosos, había algo en ella que hacia un poco imposible conseguir pareja; ¨Su estatura¨. Media aproximadamente 1,75, algo que no se veía mucho en las chicas de la actualidad.
Ella ignoro sus palabras y se concentró en mirar a su alrededor.
-Ya que estas soltera, porque no buscas a alguien para divertirte esta noche-sugirió el mozo algo coqueto.
-No se coquetear-Admitió ella sonrojada.
La miro a los ojos durante unos segundos, al ver su timidez descubrió lo que pasaba con ella.
-Entonces…Solo toma un poco de la bebida-el amable mozo le acerco su bebida-Y rompe tus límites.
Emily lo miro algo dudada.
-Dame una botella de la bebida mas fuerte que tengas-le pidió ella.
En esos pocos minutos había ingeniado un plan, era absurdo y mediocre, pero la vida es solo una.
-Aquí esta-le mozo le paso la botella y se quedo esperando ver lo que iba hacer Emily.
Lo que no esperaba era que ella vertiera el liquido de la botella sobre sí misma.
- ¿Estas loca? -exclamo el mozo al ver lo que estaba haciendo.
-Vuelvo enseguida-Emily se levanto de asiento y fue directo hacia la pista, se quedo unos segundos observando a todas las personas, pero mas a fondo a los hombres.
-Te encontré-grito emocionada al ver un chico guapo de piel morena.
Con su mejor postura empezó a caminar moviendo de un lado hacia otro sus caderas.
-Hola ¿Quieres bailar? -le pregunto ella al estar frente aquel ¨chico guapo¨.
El chico subió su mirada encontrado se con aquellos ojos color miel.
-Te sugiero que ni le toques un pelo o te dejare calva-una chica rubia se hizo presente en la conversación que a penas empezaba-Ni se te ocurra toca a mi esposo.
Entonces está casado-pensó.
La chica se quedo observando a Emily con una odiosa mirada a su existencia, al ver que no se marchaba alzo su mano para golpearla.
-Lárgate-ordeno ella, Emily miro a su lado y antes de ser golpeada corrió hacia una esquina del bar.
-Que intensa-susurro para sí misma.
Enseguida se rindió y empezó a caminar hacia el mozo, quien la veía riéndose de la horrible situación que acababa de vivir. Se detuvo en seco al caer encima de las piernas de un chico.
-Lindos labios-soltó sin pensar cuando observo el rostro del chico.
El chico hizo una mueca de asco al percibir el fuerte olor a alcohol de la chica sentada encima de sus piernas.
-No me internan las chicas-le menciono el a ella.
-Pero de seguro aun tienes tu aparato reproductor-Emily le toco la mejilla- ¿O me equivoco?
-Detente-el chico quito la mano de su mejilla-Lo único que tengo en un arma y muero por probarla, así que no me provoques.
Emily empezó a sudar frio y en menos de un minuto se levanto para ir hacia el mozo y regañarlo por darle falsas esperanzas.
Pero se llevo la sorpresa de no verlo ahí.
- ¿puedo saber hacia dónde fue el chico que estaba atendiendo hace unos minutos? -le pregunto a la chica que estaba preparando bebidas.
-Esta hablando con su hermano en aquella esquina-Emily volteo a mirar hacia donde la chica le había señalado.
Se movió rápido y se acerco a aquellos chicos que estaban gritándose el uno al otro.
Mientras tanto aquel mozo discutía con su hermano, el sujeto lo había ido a buscar para llevarlo a su casa a rastra.
-Mas te vale que vayas conmigo a casa, o tendrás serios problemas-le ordeno el mayor al menor con una voz autoritaria.
-Déjame disfrutar mi juventud, lo ultimo que quiero en estos momentos es terminar como tú, un hombre malhumorado que no sabe disfrutar de los placeres de la vida-le regaño el a su hermano.
-Dylan, vamos a casa-le dijo su hermano con una sonrisa forzada.
-Entonces te llamas Dylan-los interrumpió una dulce voz.
Ambos hermanos se miraron entre si y luego miraron a la alta figura que estaba frente a ellos.
-Te imagine mas pequeña cuando estabas sentada hace unos minutos-le dijo el mozo midiéndose con ella-Eres muy alta.
-Gracias, pero no estoy aquí para que me halagues, hace un momento un hombre me amenazó con matarme si no lo dejaba en paz, me diste muchas esperanza-la pelinegra empezó a golpearlo en el pecho-ahora solo huelo a alcohol.
-Ya veo-Dylan miro a su hermano-Estas ebria.
-No lo estoy-le grito ella a la defensiva.
-Eso diría un borracho, hermanito puedes hacerme el favor de escoltar a esta hermosa dama a su casa-su hermano lo miro con cara de poco amigos.
-No estoy ebria-grito ella antes de tomar la bebida que estaba tomando el hermano de su nuevo conocido y de un sorbo termino de beberse el resto del liquido que quedaba en la copa.
-NO-Dylan trato de detenerla, pero ya era demasiado tarde.
Emily enseguida empezó a sentirse caliente, sus mejillas se tornaron de un rojo intenso.
-Tengo mucha calor-Emily se removió por todo el lugar-Necesito aire.
- ¿Qué tenía esa bebida? -el extraño la sostuvo del brazo- ¿Qué intensiones tenías conmigo?
-Ninguna, mejor deja de hablar y llevémosla a una de las habitaciones del bar-Dylan tomo a la chica entre sus brazos y con su hermano detrás siguiéndolo.
Ambos hermanos subieron hacia la parte alta del bar, lugar que estaba disponible solo para miembros vip del lugar, en cuanto lograron encontrar una habitación disponible; tiraron a Emily en la cama.
-Cerrare la puerta con seguro así nadie entra-Dylan empezó a buscar la llave un su bolsillo, segundos después tomo un baso de agua de la neverita de la habitación-Bebe un poco de agua.
Le ofreció el vaso a su hermano, quien estaba admirando a la belleza que estaba encima de la cama. A pesar de llevar un vestido algo grande para su cuerpo, lucia muy hermosa.
-Gracias-le dijo el tomando el vaso y bebiendo de él.
Los ojos del hermano mayor se agrandaron al sentir una gran punzada de calor en su interior.
- ¿Qué tenía esa bebida? -pregunto el en un jadeo.
-No eres tan fuerte después de todo-le dijo Dylan tirándolo a la cama-Que disfrutes tu noche hermanito-y luego de decir aquellas palabras abandono al habitación.
El hombre se removió un poco en la cama despertando a la chica que dormía a su lado, era un hombre fuerte que aguantaba muchas cosas, menos esta.
-Tengo calor-Emily se pego a la espalda del hombre-Ayúdame.
El chico cerro los ojos al sentir la sensación que Emily le causaba.
-Tu lo pediste-enseguida se puso a arcadas de ella y empezó a besarla.
En menos de un minutos los jadeos y gemidos que causaban la pareja se escucharon por toda la habitación.
Afuera, Dylan que había escuchado algunos sonidos encendió un cigarro y soltando una fuerte bocana de humo miro hacia afuera.
-Feliz día de los enamorados hermanito-felicito el en un susurro casi audible.
……………
A la mañana siguiente en una cama grande se despertó la pelinegra un poco perdida, miro hacia su lado con sorpresa y luego miro debajo de las sabanas.
- ¿Qué hice? -se golpeó la cabeza-Soy una tonta.
Enseguida se levanto de la cama, soltó un gemido cuando sus pies tocaron el frio piso y se dedicó a Observar al hombre a su lado mientras se vestía, por lo menos era guapo.
Se termino de vestir, y con sus zapatos entre sus manos salió corriendo de aquella habitación.
Los recuerdos la atormentaron durante todo el viaje a su casa, su teléfono no tenia batería, y a penas tenia para pagar el taxi.
En cuanto llego a su casa se sorprendió al escuchar los horribles gritos que provenían desde la sala, era su tía quien gritaba alarmada.
- ¿Qué pasa? -pregunto ella con miedo de que le haya pasado algo malo a su madre.
Su padre era su único familiar que la cuidaba, años después de su nacimientos entro a la habitación de su madre a jugar, pero se detuvo en la puerta cuando observo como su tía asfixiaba a su propia hermana con una almohada hasta la muerta, le dijo a sus padre, pero este no le creyó, tristemente su madre cayo en un coma.
La vieja bruja al ver a su cuñado se aprovechó de el y aunque ella decía que solo lo estaba ¨consolando¨ al final quedo embarazada de su bebé.
-Tu padre va a mandar a tu madre al extrajeron, dijo que no quería seguir viviendo con ese esqueleto viviente-los puños de Emily se cerraron al escuchar la explicación de su tía, al parecer sus gritos no eran de tristeza si no de felicidad.
- ¿Cómo te atreves? -enseguida se tiro encima de ella y empezó a golpearla en rostro.
Sus golpes no eran débiles, el rostro de su tía no duro mucho cuando ya estaba sangrando de la nariz.
Su padre llego enseguida y las separo, tiro a Emily a una esquina y ayudo a levantar a su ahora esposa.
-Te vas junto con tu madre, las quiero a las dos fuera del país esta misma tarde-Emily se levanto del suelo y luego miro a su padre.
-Está bien, después de todo siempre han sido ellas primero que nosotras, su hija es idéntica a su madre, una arpía chupa sangre, esta vez chupa dinero-se burlo de la mujer presente-Iré a recoger mis cosas y luego me llevare a mi madre.
-No es necesario, el jet privado te espera para sacarlas del país hoy mismo, por fin descansare de ustedes, me tenias harto-le grito tratando de que se sintiera mal, pero Emily no dejo de sonreír, siempre se mantuvo sonriendo.
Tomo su bolso y salió de la casa sin decir nada, cuando estuvo frente al jet privado se detuvo a ver el cielo un momento.
-Dios dame fuerzas-pidió ella un sollozo.
Ella volvería, esta vez mas fuerte que antes, volvería para vengarse de las víboras que Vivian su antigua casa.