El tiempo pasa volando y por fin llega mi hora de salida. — Uff, que día tan estresante el de hoy. Creo que mañana no podré venir a trabajar, ya que seguramente moriré dentro de poco por el cansancio—dice Daniela estirándose en su puesto de trabajo—. — Afortunadamente hemos hecho nuestro trabajo sin alguna complicación. Así que no hay algo anormal o difícil que haya hecho que el día de hoy sea tan agotador como aseguras, es más, de los pocos días que llevo aquí hoy ha sido el más tranquilo. — Lo dices, porque tú no tienes a alguien que te motive a trabajar aquí. Ruedo los ojos, ya se a que se refiere. Esta mujer es extremadamente agotadora. Siempre habla de ellos y lo ha hecho durante todo el día, por lo que, eso si es lo que sin duda, agotaría a cualquiera. — ¿No te das cuenta q