CAPITULO 31
No tuve noticias de Eryx, no sabía si Amara le había dicho que me había contado todo, mis padres llegaban hoy, y no sabía como iba hacer para explicarles todo lo que había pasado, tenía tanto que hablar con ellos, no sabía como se tomarían todo esto, de seguro mi madre diría que estaba tonta de fabrica, Dios.
Los niños jugaban en la alfombra en dónde yo estaba sentada con ellos, el 27 de diciembre salimos con Amara dimos una vuelta por la ciudad, a los niños le hacía falta eso, salir y convivir con más personas y agradecida que Amara me hubiese acompañado y ayudarme con mis hijos.
Tocan la puerta y me paro corriendo para abrir ya que se que trata de mis padres, los niños gatean de manera rápida detrás de mi siguiéndome y quizás preguntándose a dónde iba con tanto afán, abro la puerta y me tiró a los brazos de mi padre mienstras que mi madre corre a dónde sus nietos, Darién deja que lo bese pero Adonis no el se aleja y se engancha a mi pierna pidiéndome con sus ojitos que lo aleje de la vieja loca.
-Tan rápido se olvidó de su abuela?- me pregunta papá acariciando la carita de mi bebé y este se quita.
-Adonis es más...
-Es más timido- termina mi madre por mi y se para con Darién en brazos- los extrañe mucho.
Le muestro a mis padres todo, y les doy un cuarto el cual ya tenía arreglado para ellos, se quedan en ella arreglando sus maletas y mis hijos con ellos, Adonis un poco alejado pero su deber no lo dejaba irse y dejar a su hermano con los que para el eran extraños, mi pequeño valiente.
Yo por mi lado aprovecho para bañarme y pedir algo para la cena, y preparar los biberones de los niños, ya mis hermosos iban a cumplir sus 7 meses y deseaba que ya fueran grandes que pudieran hablar y caminar para sacarlos a todos lados.
Durante la cena le conté a mis padres todo el asunto de Eryx mi padre estaba un poco tenso, pero mi madre no dejaba de hablar y preguntar pero yo no tenía la repuesta para todo, me preguntaron si no lo había buscado, pero es que no tenía como, no tenía un número telefónico al cual llamarlo, y se que se lo podría pedir a Amara pero no quería hacerlo.
Prefería atrasar el momento, y que todo pasará en su momento, faltaba poco para ir al juzgado y quería y le pedía a Dios que todo saliera como yo quería y a favor del bienestar de mis hijos, porque ellos eran los que más importaban en esta situación.
-Te vamos a apoyar en lo que sea, eres nuestra hija, siempre estaremos aquí para ti- me dice papá y le sonrió porque se que es así.
-Eso lo sé, y no saben cómo me a costado estar tan lejos de ustedes- mamá empieza a moquear haciendo que mi padre y yo rodemos los ojos.
El 31 llegó rápido y con ello el fin del año, mi madre estaba emocionada y los niños al parecer les gustaba la visita, habíamos salido a ver la ciudad mis padres estaban encantados, y yo solo podía pensar en lo mucho que me gustaría tenerlos aquí siempre, mamá sabía como tratar a los niños lo que era sorprendente ya que yo era hija única
Mi padre como siempre era más reservado con sus sentimientos pero se notaba que nos había extrañado y no era para menos, éramos su hija y sus únicos nietos. Los días con mis padres pasaron rápido hasta el día que se tuvieron que ir y yo volver a mis labores en la empresa.
-Los voy a extrañar - vine al aeropuerto a depsedirlos y los niños se habían quedado con Sharon, a la cual al parecer extrañaron mucho.
-Y nosotros a ustedes- mi madre me abraza y me da varios besos, tan emotiva comos siempre .
-Ya deja a la niña, la avergüenzas- mi madre se aleja indignada y es hora de abrazar a mi padre- te amo mi vida.
-yo también te amo- murmuro en el abrazo, me harían mucha falta
Amara y Jason también se incorporaron al trabajo, almorzaba con ellos todos los días, bueno Jason aveces no bajaba ya que tenía reuniones y mi amiga aprovechaba para babear por todo aquel hombre guapo que cruzará la puerta del cafetín, yo la verdad no estaba internada en ninguno, ella decía que debía de aprovechar mi soltería pero ya esos tiempos habían pasado.
El día de ir a los juzgados se acercaba y con ello el miedo de ver a Eryx de nuevo y que este no quiera hablarme más, o que este muy furioso y quiera quitarme a mis bebés, Dios porque todo tiene que ser tan difícil ?
-Amara- la llamo y ella aparta la vista de su comida para enfocarse en mi.
-Haz hablado con Eryx?
-Que directa - se ríe y nieg- no, cómo te dije el y Jason no tienen tan buena relación así que no lo he visto y tú?
-No
Necesitaba poner todo en orden, al salir corrí a casa esperaba de que Eryx se apareciera en cualquier momento pero no lo hacía, quizás luego de ir detenido no tenía ganas de acercarse más a mi, lo entendí yo tampoco lo haría, estoy loca, hace unos días lo quería muy lejos y ahora deseaba que el estuviera lo más cerca posible para poder solucionar y arreglar todo, antes de que llegara el día de ir a declarar, deseaba que nada de descontrolara ese día.
-Alyn- me saluda Sharon cuando abro la puerta ella está sentada en el suelo con los niños los cuales comen galletas.
-Hola Sharon que tal el día?
-Los niños se portaron bien como siempre- le sonrió y me siento en el sofá luego de darle un beso a cada uno.
-Y los estudios?- ella hace una mueca y niega.
-Mama enfermó, tiene cáncer tengo que congelar por algún tiempo- se me arruga el corazón ey me acercó para darle un abrazo,.
-Si necesitas tomarte un tiempo no tengo problema con ello- ella niega de manera rápida.
-Necesitsmos el dinero, no se preocupe cumpliré con mis obligaciones.
-No me preocupa eso Sharon, si no que necesites estar en casa lo puedo entender es tu madre, si necesitas faltar algún día porfavor dímelo, estoy aquí para ayudarte.
-Gracias Alyn.
Era lo menos que podía hacer por ella, trataba de maravilla a los niños, los cuidaba siempre hacía más de lo que se pedía era una buena chica no merecía estar pasando por tanto, si tuviera el dinero la ayudaría pero desgraciadamente no podía apenas ganaba para cubrir los gastos de la casa y de los niños, no podía darme ese lujo y me dolía, cómo había personas con tanto dinero y otras sufriendo por no poder gastar en cosas básicas.