Emperatriz temblaba de los nervios, jamás se imaginó que volvería a ver a Guillermo justo el día de su boda, ella pensó que él estaba allí por ella, porque pretendía impedir la ceremonia, pero de pronto miró algo que definitivamente terminó por sorprenderla y confundirla más de lo que ya estaba. Estaba en shock cuando Cándida se acercó a él y lo tomó por el brazo mientras le daba un beso muy cerca de sus labios. Emperatriz no conocía a Cándida, ella no sabía que se trataba de la hermana de Rogelio y además no entendía de dónde Guillermo conocía aquella mujer. Maruja por su parte, estaba con una sonrisa que no cabía en ella, se sentía totalmente triunfante ante aquel espectáculo que estaba presenciando. Hasta en el fondo llegó a pensar: “Pero qué maravilla lo que acaba de hace