PVO Siriana.
Después de largas horas que parecieron eternas y ya con la tranquilidad de saber que mis corderitos estaban lejos del ojo de Terry, llegamos a Nueva York. Él por su lado y yo por el mío aunque solo por las habitaciones. Por supuesto, Terry no me dijo que había reservado en el mismo hotel que el mío. Me pregunto cómo supo eso, ¿Joseph le habrá dicho?
_¿Srta Siriana?
_¿Que?
_Será mejor que descanse por ahora, mañana tenemos mucho trabajo y la feria nos espera.
_Tienes razón Joseph, por cierto, ¿Tienes idea de cómo tu hermano se enteró donde me hospedaría?
_Le juro que no dije nada, si es lo que está pensando.
_Bien.-Supongo que le tendré que creer. Lo miro y tiene unas ojeras, creo que William no mentía cuando dijo que estaba triste.-Oye Joseph, ¿Que tal si salimos a toma
