Cómplice
(Filomena)
—No vuelvas a inventar planes de ese tipo conmigo. No puedo dar espectáculos de esa manera. Todos en la ciudad me conocen, es más, ya estoy preocupada de que mi marido sepa que vine a este lugar. —dije acomodándome el cinturón de seguridad porque sentía que de regreso íbamos a volar de nuevo.
—No te hagas la inmaculada. Tú misma me confesaste que tienes amantes. ¡Eres tan pervertida como yo! —dijo Sandra chupándose los dedos «¡Qué asco!»
—No es lo mismo, nunca me expondría así. Y de paso el hombre que me elegiste. ¡Ni loca me dejó coger de esa máquina s****l! Ya suficientes problemas tendré si mi marido se entera de que te busqué. —Cuando el señor Roberts hablaba no repetía.
—Aún es temprano, iremos a bailar a otro lado… No, sabes que se me está ocurriendo algo
