CAPÍTULO VEINTE
Riley estaba impaciente por ver el garaje donde Murray casi había muerto. Tal vez en la escena del crimen sería capaz de entrar en la mente de este asesino. Eso a menudo funcionaba para ella, y necesitaban algún tipo de introspección para poder detenerlo antes de que matara de nuevo.
Mientras Bill condujo, Riley pensó que necesitaba la opinión psicológica de Mike Nevins. Ella lo llamó y le contó acerca de la entrevista con Murray.
“Hicieron un buen trabajo”, dijo Mike.
“Tal vez”, dijo Riley. “Pero me da la sensación de que está reprimiendo muchas cosas”.
“De seguro”.
Mike hizo una pausa por un momento.
Entonces dijo: “Mira, iré al hospital y lo entrevistaré yo mismo. Me llevaré a un dibujante policial”.
“¿Realmente crees que podrás sacarle una descripción del sospec
