Despertares Sexuales

Primer Libro

Capítulo último: A mi amor platónico.

"Tenía una sonrisa de alegría honesta en mi rostro, aun cuando las lágrimas escurrían por mis mejillas, teníamos que separarnos. ¿Por qué? La respuesta era sencilla: nos amábamos.

La mayoría se hubiera quedado, se hubieran casado, formado una familia y hubieran buscado vivir el típico cuento de hadas con aquel final de “... Y vivieron felices para siempre.”

Pero... ¿Y si para nosotros no existía ese final? Además, siempre fui consciente, mi cuento, aún y cuando había comenzado con el “Había una vez...” No era típico.

Nuestra relación fue tan intensa, que siempre fuimos él y yo. Los problemas y las alegrías que enfrentamos, lo hicimos tal cual, juntos, siempre juntos. Para mí él no tenía defectos, y la última noche que compartimos me lo confesó, yo era perfecta a sus ojos. Entonces lo supimos: no podíamos permitir que lo nuestro se arruinara.

La belleza de nuestro amor, la pureza, el desinterés y la pasión, se mantendrían incorruptibles; sobrevivirían a la finitez de nuestros corazones, de nuestro raciocinio y por qué no, del tiempo mismo. Teníamos que proteger nuestro amor, incluso de nosotros mismos, haciéndolo eterno, perfecto.

Y ahí estaba, escuchando el corazón acelerado del único hombre al que le había entregado todo mi ser; sintiendo sus brazos rodearme, sabiendo que la fuerza que estaba utilizando era porque no quería dejarme ir. En ese momento tuve un deseo, poder romper las leyes de la física y la razón, que mi cuerpo fuera absorbido por el de él. Una vez dentro, mi ser convertido en una esfera de energía, viajara de manera cálida hasta encontrar el camino a su corazón, y vivir en él, por la eternidad. Nuestra unión sería perfecta, así cumpliríamos nuestro deseo, nuestro sueño.

Mi vuelo fue anunciado. Un momento más por favor, supliqué. Con anterioridad, pensé que sería difícil, me había planteado la situación en varias ocasiones como pruebas a mi corazón y voluntad; sin embargo, estar en la realidad me estaba sobrepasando, estaba en el límite de lo imposible. ¿Era ésta la decisión correcta? La última llamada para mi vuelo y él me soltó. En ese momento lo supe, tenía que alejarme en ese preciso instante, de lo contrario, jamás nos separaríamos.

El futuro era incierto, pero nuestro amor, se mantendría dentro de nosotros, intacto, fiel; perpetuado en nuestras memorias.

Fin."

Libro: Amor Platónico

Autor: Aranza Olivier

Año: 2000 U.P.