- ¡Dios! Apaga ese aparto infernal – Kat se puso la almohada en la cabeza mientras se quejaba de la alarma. - Tenemos que ir a trabajar – le saco la sabana del cuerpo descubriendo su trasero – Amiga si no sales de la cama me va a encantar hacer cochinadas contigo. – le doy una cachetada en la cola. - Paige si no fue porque amo mucho los p***s, créeme que ya nos habríamos acostado – se sienta y me rio a carcajadas. - Parece que hubo una pelea de pagaros en tú cabeza – me saca el dedo del medio y camina hacia el baño del pasillo – Cambia de tema Paige, la próxima te beso sin medio problema. Sonreí y me levanté a bañarme, en un rato debíamos salir y gracias al alcohol hoy tenía una resaca tremenda. Sabía que parte de mi humor se debía a lo cerca que