Brooke Pov: ...Creo…Que ha llegado la hora. Con rapidez y con las manos temblando de los nervios, tecleo una respuesta corta y precisa. “Buenas tardes, señor Lefebvre; he estado muy bien, gracias por preocuparse. Estaré ahí enseguida” Envío el mensaje y aún siento como mi pobre cuerpo tiembla como si hubiese un terremoto bajo mis pies ¡Voy a ver al señor de hielo! ¡Que nervios! De solo pensar en él, todos los vellos de mi cuerpo se erizan y mi corazón se acelera al punto de que mi pecho duela… —¿Está todo bien, señorita Jones?— me pregunta preocupado el hombre a mi lado y caigo en cuenta de que sigue aquí conmigo. Que terrible persona soy, otra vez me olvidé del mundo por andar encerrada en mis pensamientos. —Sí, todo bien—lo tranquilizo con una pequeña sonrisa y guardo el teléfono