» Para que el flujo marche bien y todo deba ser, ambas partes unidas deben uno ser. Eso era lo que el árbol le había impreso en el cerebro a Valery pues sabía que el único problema que tenía era la desigualdad, la discriminación de ambos, uno porque era malo y el otro porque era bueno, puesto que sus Merkaba corrían de manera distinta en todos los aspectos, Valery se encontraba recostada de una roca dentro de una caverna cerca del mar, hacía ya un rato que llevaban allí, ella y Gneis, debido a que ella quiso explorar el paisaje que se le hacía más que familiar, tenía algo de hambre y su estómago no era muy silencioso al respecto, mientras Gneis nadaba dentro de las aguas dulces de la caverna. Valery se puso de costado en la roca y observo a Gneis nadar un rato, tenía como almohada la chaq