Noah no quería mirar el rostro de Katherine, ella se encontraba sentada en los asientos giratorios de la isla que daba la vista hacia la desordenada sala de estar del Beta. Los ojos cafés oscuros de la mujer no se habían despegado de Noah, quien se encontraba acomodando un poco el lugar ante la visita de Katherine. Por dentro el Beta hubiera querido que ella estuviera allí en otra situación y que su casa se encontrará como siempre la dejaba, ordenada y limpia. Katherine se levantó sin hacer mucho ruido, dejando sus pertenencias en la isla y comenzó a buscar entre los cajones de la cocina una bolsa de basura, al conseguirla comenzó a ayudar a Noah que se dio cuenta cuando volteó su rostro. — Señorita, no debe de hacer eso. Permítame y lo termino en un momento… — Noah estaba a nada de qu