- Eres una excelente trabajadora. Desde que llegaste a trabajar en este lugar nunca había recibido alguna queja tuya. Todo lo contrario, recibí buenos comentarios hacia ti. Incluso de los hijos VIP del lugar. Lo cual sabemos, son muy difíciles de llevar –dice con obviedad. Para después suspirar– pero ni siquiera con eso te puedo ayudar. Y lo sabes. Es algo que se me sale de las manos, por más que no lo quiera aceptar. - dice para colocar su mano en mi hombro– eres una chica muy inteligente, dedicada y amable. Cualquier padre desearía que sus hijos se parecerían un poco a ti. Te estimo y lo sabes, pero también debes de saber que aunque mi negocio sea grande, no puede ir en contra de él –el bastardo de Dylan– por eso espero que entiendas mi desición y no me odies, mi pequeña Zoe - dice para