Derek enojado sube hasta su habitación, encuentra a Zamira llorando frente a la ventana. Se acerca y la toma de los brazos hasta jalonearla, siente que definitivamente ella ha sido una invasora en su vida. —No sabes cómo te detesto, ojalá y nunca hubieses existido— Le dice bajo los efectos del enojo. —Tus palabras me hieren Derek. Mi único error ha sido amarte, ese ha sido mi más grande pecado— Le responde bajo los lamentos del dolor. —Ha ¡Tú hablándome de amor! Quien ama no hiere a esa persona y tú lo hiciste. —Nunca quise herirte, al contrario, siempre quise que fueras feliz. —¿Querías que feliz acabando con lo que tenía con Susan?— Le pregunta irónicamente. Zamira no sabe que podría responder en ese momento, Derek estaba muy enojado, no podía recordar ese momento, porque enfurecí