Roger La noche fui muy divertida, reímos, comimos, bailamos, festejamos mucho, no importa la resaca que tendríamos después era una felicidad poco conocida que necesitábamos en estos momentos. La fiesta siguio de largo nadie se fue casi hasta el amanecer, nos divertimos y conocimos dotes de artistas que creían tener nuestros viejos amigos, claro que un gallo ronco cantaba mejor que ellos, ¡pobre nuestros oídos! ¿A quién se le ocurrió traer un karaoke? Nos despedimos de los últimos invitados, y nos retiramos a descansar obviamente Dylan y Thomas se quedarían en sus habitaciones ellos ya sabían cuáles eran, prácticamente también es su casa. La sed hizo que me levantara, me sentía totalmente mareado, el mundo se movía a mis pies, aún era temprano ¿por qué me levanté? (eran pas