El amanecer nos encontró desnudos a ambos en la cama, las sabanas mojadas de nuestro sudor y nuestros néctar, la alarma sonaba pero apenas la escuche, largue un manotazo para que se callara el maldito despertador, solo escuche un ruido fuerte creo que lo rompí, me di vuelta para abrazarlo pues mi grandote seguía dormido, solo jadeo un poquito Cuando nos despertamos ambos el sol estaba en lo alto, agarre el celular para ver la hora y vi que ya era mediodía, nos quedamos dormidos, nos observamos somnolientos y sonreímos para besarnos, lo abracé fuerte y pregunte ansiosa —Albert ¿Cuándo debes integrarte a tu trabajo? Es que quisiera tenerte más tiempo junto a mí Me observo divertido y solo contesto estirándose de lo lindo —Mmmmmm no séee, no me han informado nada todavía Me lo quede mira