—Deseo invitarte a Italia, tengo unos asuntos de trabajo y quisiera que me acompañes, nuestros amigos irían después, ¿Qué dices? —Ella se ríe—. ¿Me estás escuchando? —La mira y ella solo está pendiente de su celular—. ¿Sam? —No le responde. Él le quito el celular y se levanta, camina hasta la esquina de la habitación y lee el nombre del contacto, ella de inmediato se levanta y se pone detrás de él para poder quitarle el celular pero Alessandro no la deja, él logra ver los mensajes, «Mi amor, dame la oportunidad» mensaje de Noah, «Tendríamos más de diez hijos, quiero tener algo serio con vos» mensaje de Noah, a Alessandro no le ha gustado esos mensajes y no podría despedirlo tampoco. —¡Dame mi teléfono! —exige y él se voltea alzando el celular. Alessandro respira profundo para no perder