Después de mi grado donde el centro de atención fue mi hermana, quien afortunadamente empezó a salir de su letargo luego de hablar con sus padres biológicos; una sensación de sin sabor fue creciendo en mi pecho, no entiendo como mi día especial se convirtió el de ella, es como si me comprometiera el día de su cumpleaños, o si el día de sus boda anunciara mi embarazo, algún hecho así de transcendental e importante que la opacaría por completo a ella, probablemente Annie hubiese hecho un escándalo. Sin embargo, me ha tomado el tiempo de encargarme de alejar esos pensamientos de mi cabeza, no quiero pasar estas últimas semanas en casa amargada y llena de resentimiento por eso, aunque tal vez siempre cargue con esa sensación por algún tiempo. Con Oliver nos hemos turnado la navidad, afortuna