LA BRUJA

EIDAN Podía sentir el aire fresco del bosque mientras corría entre los árboles, no podía dejar escapar a mi presa. Me detuve atrás de un árbol apuntando con una ballesta hacia el venado qué venía siguiendo. Sonreí pensando en la cara que pondría André cuando se diera cuenta de que había cazado algo mucho más grande que unos simples conejos para el festejo de esta noche. Cuando estuve a punto de disparar llegaron a mis oídos unas inconfundibles pisadas de lobo. No me dio tiempo a quitarme de mi escondite cuando un enorme lobo blanco con una mancha amarilla en el lomo se abalanzó hacia mí, haciendo qué los dos rodáramos por la tierra. - ¡Auch! - Me queje parándome mientras escupía una hoja de pino qué se había metido en mi boca - Eres un idiota - Solté al mirar a mi alrededor y no ver al venado qué venía siguiendo desde hace un buen rato. Escuche una carcajada a mi espalda qué me hizo voltear, estaba bastante enojado con él. Kiron... Era igual a su madre, pero su personalidad era idéntica a mi tío, Tom. - Perdón, primo. - Se disculpó, pero sabía muy en el fondo qué no había sinceridad - Es que también tú estabas en mis terrenos, pensé que eras un oscuro maligno qué venía en busca de venganza. - Levanto las manos para después mover los dedos en pequeñas ondas como si me quisiera espantar con lo que había dicho. Levante una ceja ante sus palabras, Kiron no se tomaba nada en serio cuando se trataba de lo que nos habían dicho nuestros padres sobre una posible pelea en el futuro con enemigos de la manada Moon Red. Al parecer nuestros abuelos habían hecho bastante enemigos. - Ni siquiera he pasado el límite hacia el bosque oscuro - Solté haciendo obvio en donde nos encontrábamos - Lo hiciste a propósito, por tu culpa no pude cazar al venado. Él no contesto por un momento, pero después soltó nuevamente otra carcajada, qué hizo qué yo también me riera. - En verdad eres un idiota - Murmuré, parando de reír. - Tú eres el idiota, ¿Qué crees que estás haciendo? - Habló, seriamente - Muy pronto será la ceremonia en donde nos ascenderán a Alphas y tú sigues jugando a ser cazador para atrapar a un venado, eres un hombre lobo porque no te conviertes en uno y lo matas. Me encogí de hombros, levantando la ballesta, qué se encontraba a unos cuantos pasos de nosotros. - Me gusta cazar en mi forma humana - Respondí. - André, Thiago, Axel y Alex, ya están en la manda desde hace horas - Me observó por un largo segundo - Estaban preocupados por ti. - ¿Preocupados por mí? - Pregunté, tratando de no reír. - Está bien, está bien - Asintió - Más bien preocupados de que no te hubieras metido en un lío. - Eso suena más creíble - Compartimos una larga mirada para después volver a reír. - Te preocupa ser Alpha - Dijo después de unos minutos. Aunque yo era un año mayor que Kiron, siempre nos llevamos bien, y nos conocíamos bastante. Sabía que el miedo que tenía, él podía sentirlo. Más qué un primo es como un hermano para mí. - ¿Acaso a ti no te preocupa ser Alpha? - Pregunté, mirándolo fijamente - No te preocupa... Ser un fracaso. - Ser un fracaso... - Frunció el ceño - Eidan Black Green... Teme ser un fracasado al liderar a la manada Moon Red, ¿El Eidan popular de la universidad y de la manada en verdad me está diciendo eso? - Cállate, entiendo tu punto - Volteé a mirar un pino, qué se veía mucho más interesante, qué al albino de ojos miel, qué tenía enfrente de mí - Es una tontería que yo tenga miedo a eso. - Obviamente; sin embargo, a la vez te comprendo. - Asintió y comenzó a caminar hacia mí para tomar uno de mis hombros - A pesar de todo... No estarás solo, me tendrás a mí a tu lado. - Qué gran alivio - Susurré, burlonamente. - No me animes tanto. Mi comentario solo hizo qué recibiera un golpe en el costado de mis costillas. - Ey, tendré diecisiete, pero soy un lobo feroz - Extendió los brazos para posteriormente doblarlos, mostrándome los músculos qué tenía. Su gesto hizo qué soltáramos nuevamente una risa. - No sé qué haría sin ti - Le hice saber, parando de reír. - En verdad no sé lo que haría. - Pues... Prácticamente, tu vida sería un desastre - Se encogió de hombros - Agradece qué mis padres hicieran el delicioso y naciera esta belleza de primo, que trata con mucho esfuerzo que no te metas en problemas. - Tu vida sería muy, pero muy aburrida si no me metiera en problemas - Dije guiñándole un ojo - Y hablando de problemas... - Quieres atrapar al venado, - Me interrumpió, sabiendo lo que le iba a proponer. - Verdad. Asentí, afirmando lo que quería, ese venado no se me podía escapar después de todo el rato que lo había seguido por el bosque. - Pues entonces tenemos que apurarnos - Soltó, mirando el cielo, que poco a poco se estaba volviendo de un azul oscuro - Muy pronto anochecerá y nuestros padres nos mataran si llegamos tarde a nuestra propia ceremonia. Sonreí de lado al imaginarme la cara que pondrían mis padres si llegaba tarde. - Quita esa sonrisa, no te dejaré llegar tarde - Pronunció al ver mi rostro. - Aburrido - Resoplé - Podríamos llegar con estilo. Se encogió de hombros para posteriormente convertirse en lobo. - Lo cazaré contigo solo si te conviertes en lobo, así será más rápido - Habló en mí mete, mirando hacia mi dirección, esperando a que me convirtiera. Él tenía razón, sería más fácil cazarlo, pero tremendamente aburrido para mí, con un pequeño bufido dejé a un lado de un árbol la ballesta, talvez podría volver por ella mañana, ya qué todo terminará. Me alejé de Kiron unos cuantos pasos, indicándole qué empezará a correr, cuando vi que se alejó de donde estábamos, yo también comencé a correr detrás de él aun en mi forma humana para posteriormente convertirme en lobo y seguirle el paso a mi primo.