Rocco mantiene fija su mirada en mi y continúa con lo que estaba explicando —Debes entender, que dentro de la mafia no hay arrepentimientos, si decides quedarte al lado de Stephano como su mujer o su amante, no hay forma de que salgas de aquí, aquí no existen las separaciones, si algún día decides abandonarlo la única forma en que te alejas es con la muerte— bueno, eso imaginaba y en vista de que no tengo pensado abandonarlo, es algo que no me aterra —Quiero hablar contigo — ordena Stephano y camina hasta una habitación que al entrar veo que es un despacho —Tengo que volver, si quiero enfrentar a Santoro debo hacerlo desde la misma posición que tiene él, de lo contrario no podré ganarle, yo he hecho muchas cosas que no me enorgullecen, pero esto es lo que soy y no puedo cambiar quien fu