[Hassim Haram] Miraba por la ventana del pequeño cuartito que había rentado. Ya habían pasado dos semanas desde mi secuestro por parte del Jeque Al Sahif y su hija la princesa Amira. Tuve que esconderme de ellos porque de seguro me estarían buscando. Me cambié del lugar donde me quedaba, me quedé encerrado esperando que mi brazo pronto sanará porque me lo había roto con el golpe al caer de la barda del hotel cuando traté de huir de los guardias del Jeque. Me sentía tan desanimado, había gastado ya casi todo mi dinero, no trabajaba, tenía que renovar mis permisos de pasaporte para poder salir del país, pero para hacer eso primero tenía que trabajar para conseguir dinero. El carnaval terminó hace dos días, esperaría a mañana para salir a buscar algo que me dejará unas cuantas monedas para p