CAPITULO 6

1774 Words
¡por fin amaneció! No pude dormir nada después de esa pesadilla que tuve… di vueltas toda la noche, debía sacarme esos pensamientos de la cabeza, pero hoy es uno de esos días donde me siento triste, donde siento que no voy a rendir en el trabajo. Me aliste rápidamente para ir por los chicos, para mi suerte hoy tendrían un día de descanso y solo me tocaría irles a hacer comida o si quieren ir algún lugar… espero que quieran quedarse en su casa y no salir, no tengo ganas de ir a ningún lado. Rápidamente me alisté, me puse una sudadera y unos tenis que combinaban perfectamente con mi estilo relajado, como los he estado transportando me dejaron traerme la camioneta a mi casa, así que no tengo que gastar en pasajes. … Llegue a la casa de los chicos, pero al parecer ninguno se la despertado, para mi suerte así no tengo que recibir desde temprano quejas por no reírme o socializar con ellos. Me puse a organizar la cocina, dejar todo limpio en la casa, por suerte no tenia que limpiar sus cuartos dado que eso le tocaba a cada uno de ellos… prepare el desayuno, unos panckes con miel y fruta picada, me sirvió el tiempo que trabaje en la cafetería. Lo dejé servido en la mesa para que a medida que fueran bajando, se sentaran a comer, no había recorrido la casa, y como aun no despertaban decidí dar un vistazo, se veía enorme, quería pensar un poco y el jardín me pareció un lugar excelente para hacerlo. Había una banca en el jardín, tomé asiento ahí… cuando comencé a escuchar una hermosa voz que cantaba… ¨ Existen esos días donde estas triste sin motivo alguno, mi cuerpo se siente cansado y parece que todos los demás, menos yo están ocupados y son competitivos, mis pies no avanzan… aunque parece demasiado tarde odio al mundo entero. ¡Si¡ últimamente siento que no hay muchos golpes de velocidad… mi corazón se estremece y mis palabras se estremecen… ¿Por qué? Aunque que corrí tan duro oh, ¿Por qué a mí? Vengo a casa y me acuesto en la cama y me pregunto ¨ ¿Fue mi culpa? ¨ la noche caótica. De repente mi reloj, pronto será media noche ¿Algo será diferente? Probablemente no… pero este día habrá terminado… cuando la segunda manecilla y el minutero se superponen… el mundo aguanta la respiración por un momento cero en punto… Y serás feliz… al igual que la nieve recién caída… respiremos, como la primera vez y serás feliz… cambia todo esto, cuando todo es nuevo… mi ritmo comienza a deslizarse gradualmente no puedo hacer las expresiones que deberían ser tan fáciles olvidé las letras que conocía tan bien… no hay una sola cosa que se sienta mía… así es, todo está en el pasado incluso si me digo esto a mi mismo, no es fácil ¿Es mi culpa? ¿Es mi error? Solo regresa mi eco sin respuesta… ¨ Era él cantando, esa canción me lleno tanto, no podía creer que una canción expresara tan bien como me sentía en esos momentos y como el la hacia sonar tan relajante, tan emocional, lo admiraba cantar, aun no se daba cuenta de que estaba ahí. Termino de cantar y se percató de que yo lo estaba viendo, sentía como mis nervios surgían, no sabia que decir, quede ahí petrificada, paralizada, no podía pronunciar palabra, como siempre me regalo una sonrisa. -¿Hace mucho que estas ahí? -Desde que comenzaste a cantar, por cierto ¿Cómo se llama esa canción? Es muy hermosa -Se llama ¨ Zero O´Clock¨ -Me pareció muy linda, y tu cantas muy bien… -Los chicos aun no se despiertan así que aproveche en venir al jardín a tomar un poco de aire y cantar un poco… lo que no sabia es que ya habías llegado y de que me estabas espiando. -¡oh! No, no te estaba espiando, simplemente que pensé que aun todos estaban dormidos, les preparé el desayuno y también vine por aire fresco, en ese momento comenzaste a cantar y me llamo mucho la atención, cuando comencé a escuchar la letra de la canción me sentí identificada y me quede a escucharla… ¡ lo siento si te incomodé! Ya me voy. -¿Por qué eres tan seria? Solo estaba bromeando… no es para tanto. -¡Lo siento! Tampoco debo estar aquí y menos dialogando con usted joven- Cuando me iba a dar la vuelta para irme sentí que me agarro del brazo y me jalo hacia él, quedamos frente a frente, con una corta distancia entre los dos, sentía como mi corazón comenzó a latir tan fuerte, que sentía que se me iba a salir del corazón. -Suélteme ¡Por favor! Me meteré en problemas si alguien viene y nos ve. -Nadie va a venir, ayer ensayamos después de que te fuiste y nos acostamos tarde, así que los chicos como es día de descanso duermen hasta tarde. -No importa… fue un error haberme quedado escuchándolo… si me disculpa debo retirarme para seguir con mis tareas. -¿Qué tienes que me intriga tanto? Desde el primer día que te vi, sentí una terrible curiosidad por ti… por como hablas, por como te comportas con nosotros, la manera en que quieres hacer tan bien tu trabajo que no te importa si nosotros pensamos que eres demasiado altanera. - Me disculpo si pensaron así… pero ya les expliqué, así que por favor suélteme… -¿Y si no quiero?- se iba acercando mas y mas y yo me iba colocando cada vez más nerviosa, nunca había estado tan cerca de un chico, por lo general cuando se me quieren acercar suelo alejarlos inmediatamente, pero con el sentía que era diferente ¿Qué era esto? ¿Por qué me comencé a sentir así de repente? Para mi suerte sentimos voces y él inmediatamente me soltó, yo solté un suspiro de alivio y Sali lo más rápido que pude de ahí, quería alejarme, sentía vergüenza, pero al parecer a él le gusto… … Estaban todos en la mesa desayunando, y yo estaba en el mesón que tenia la cocina, me invitaron a sentarme con ellos, pero como siempre rechace la propuesta, Hoseok no dejaba de mirarme y eso me colocaba nerviosa, a pesar de que era el mas tierno de todos no podía negar que me parecía super sexy. En ese momento entro la señorita Jung con el Ceo de la compañía, no sabía que vendrían, pero gracias al cielo que no se me ocurrió sentarme con ellos, habría sido un gran problema para mí. -Hola chicos- Saludo primero el Ceo -Hola- Dijeron todos en una sola voz -¿Cómo han estado? ¿Qué tal les ha ido con Tae Eul? - Yo rodee los ojos, tenia nervios que dijeran que les había parecido un altanera. -Es un poco fría y distante, parece un robot- Dijo el menor del grupo, el Ceo y la señorita Jung comenzaron a reírse y yo me sentí totalmente avergonzada. -Si, así suele ser ella, pero solo es porque quiere hacer bien su trabajo, en el poco tiempo que llevo conociéndola se exige demasiado, para ella no hay puntos medios si no solo extremos, por esa razón suele parecer un robot- Dijo la señorita Jung con una gran sonrisa. -¿Quién le dijo que tenía que ser como un robot?- El Ceo volteo a verme y sentí como mi cara comenzó a sentir calor. -Lo siento, me dieron la orden de que no podía tener una relación con los jóvenes más allá de laboral y eso estoy haciendo, tratando con ellos estrictamente cosas del trabajo, ya me disculpe si sintieron que fue grosera, solo quiero hacer bien mi trabajo señor- sentí como el corazón quería salirse de mi pecho en ese momento. -¿Tiene que ser así de estricta la relación con nosotros? ¿De verdad no podemos ser amigos Ceo? - Me sorprendió que Tae preguntara eso. -¡si! No pensé que ella iba a tomar mis palabras tan literalmente, pero no es necesario que seas un robot, solo que sepas cual es tu lugar en la compañía, pero no te dije que no podías hablarles… -Ok señor, entiendo- Todos rieron al ver mi respuesta, de verdad parecía un robot. -Bueno estamos acá no es por eso- Dijo la señorita Jung. -Necesitamos pedirle un favor muy grande a Tae Eul- Me sorprendió eso, ¿ahora que sería? -¿Puedes venir a vivir acá un tiempo con los chicos? Sabemos que no te contratamos para eso, pero la señorita que los atendía y el chofer pues han tenido problemas estos días y no van a poder venir por un tiempo, y la señorita Jung me dijo que haces muy bien el trabajo que te pido este favor. -No se qué decir… ¿puedo pensarlo? -No te preocupes por el sueldo, que se te retribuirá muy bien esta nueva tarea. -¡Esta bien! Acepto- No sé de dónde había salido eso… supuestamente lo iba a pensar, pero necesitaba ahorrar lo más rápido posible para poderme ir del país y seguir con mis planes. -¡Me parece muy bien! Entonces busca tus cosas y te mudas para acá. -Tengo una petición… -Claro- Dijo el Ceo. -Seguiré en mi apartamento, solo estaré acá los días de semana, y alguno que otro fin de semana que los jóvenes me necesiten, no quiero dejar mi apartamento. -Esta bien, como mejor te parezca, por ahora tienes la tarde libre para que organices tus cosas y te vengas a vivir acá- Diciendo eso ultimo el Ceo y la señorita Jung se fueron. -¡Que bien! Ya no nos puede decir que no tiene permiso de hablar o de compartir la mesa con nosotros- Sentí la voz del chico de ojitos de luna y sonrisa coqueta. -Ya podemos ser amigos- Dijo Hoseok y debo decir que eso me lleno de nervios, ya no podía decir ¨ a mi no me pagan para eso¨ porque el Ceo había dicho que no era necesario tanta frialdad, me sentía totalmente vulnerable. Todos nos dejaron a solas, pues querían aprovechar el máximo su día de descanso, yo estaba por ir mis cosas cuando sentí que me agarraron por el brazo y me susurraron al oído -¨Ahora ya no tienes excusa para no ser mi amiga, espero con ansias que nos podamos conocer mejor¨- sentí como el corazón se me quiso salir. 
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD