Dante Edwards. —¿Dante? —Levanto la cabeza y resoplo. ¿No sabe acaso que odio que entre a mi oficina sin tocar? —¿Nos vamos juntos al lanzamiento? Luisa ya está allí verificando todo y yo quiero arreglarme un poco antes de irnos. —Todavía tengo pendientes —respondo escueto bajando de nuevo la vista fija a los papeles que tengo en frente y sin darle demasiada importancia. —Pero ya la prensa debe estar ahí, no podemos llegar separados ¿Qué van a decir de nosotros? —¿Quién dice que no? —dejo mi documento de un lado y la miro. —Dante, sabes bien nuestro trato, sabes que yo… —Aaaah con que recuerdas que esto es un trato —me levanto y la enfrento. —Porque hay veces que no lo haces y me aturdes con tus pedidos de cariño y atención. Además, ya pasó un año, y ya tramité los papeles para el di