La misma noche Atlanta Gabriela A veces nos toca arriesgarnos a jugar bajó las reglas del otro, no significa que le demos ventaja, es todo lo contrario, porque sin saberlo están expuestos, como Aron que quiso sorprenderme con su propuesta, incluso se dio el tiempo de enseñarme su juego creyendo que no sabía nada de él, pero la realidad es que mi padre jugaba al póker siempre con mis tíos, y aprendí del mejor, aunque no quise decepcionar a mi esposo revelándole mi destreza, más bien estoy disfrutando mi momento de gloria, además es una forma natural de conocernos un poco más, o como lo sugirió Lucía, descubrir nuestros secretos, o cosas íntimas del otro, pues estoy preocupada por la entrevista con el gobierno, no quiero que por una estupidez me nieguen la residencia y vayamos presos, no