Mientras tanto, en la mansión situada en Highgate Wood.
—Ya todo está listo, Su Majestad —dijo Thomas con un tono tranquilo, sabiendo que su deber era asegurarse de que cada detalle estuviera perfectamente organizado.
—Sí, me retiraré a tomar un baño y a prepararme —respondió Alexander, cuyo semblante reflejaba la adrenalina de la reciente cacería, donde tanto él como Thomas se transformaron en lobos para perseguir a su presa. Al regresar a la mansión, se convirtieron en sus formas humanas y, sin perder un instante ni siquiera para vestirse, comenzaron a prepararlo todo para la boda.
—De acuerdo, también me prepararé —afirmó Thomas, consciente de que la señorita Smith llegaría pronto junto con Jaime y Campbell, completando así la comitiva nupcial.
—Sí, deben estar en camino. Son las tr
