Las miradas de los presentes se concentraron en Campbell, ansiosos por escuchar sus palabras. El mayor de la manada suspiró profundamente antes de iniciar su explicación, consciente del peso de sus palabras por lo que estaba a punto de decir. —Cuando Thomas trajo al kitsune a nuestra organización, comprendí que simplemente marcarlo y hacerlo sirviente en base a las marcas dadas por nosotros no sería suficiente para garantizar su lealtad —comenzó a explicar Campbell desde el inicio, su mirada recorriendo a todos los presentes, buscando el contacto visual con cada uno. —¿Y cómo obtuviste ese collar de sumisión? —preguntó Alexander, con un evidente interés por conocer todos los detalles. —Fue Ravi quien me lo entregó —respondió Campbell, dejando escuchar un suspiro cargado de tristeza—. Un