When you visit our website, if you give your consent, we will use cookies to allow us to collect data for aggregated statistics to improve our service and remember your choice for future visits. Cookie Policy & Privacy Policy
Dear Reader, we use the permissions associated with cookies to keep our website running smoothly and to provide you with personalized content that better meets your needs and ensure the best reading experience. At any time, you can change your permissions for the cookie settings below.
If you would like to learn more about our Cookie, you can click on Privacy Policy.
Un silencio envolvió la lujosa habitación, y luego Alexander se levantó de su asiento, lanzando el medallón con fuerza hacia el mueble de madera que tenía al lado como si de un momento a otro aquella joya dejara de tener valor para él. De esa forma, se volvió hacia Thomas y le dijo: —No es coincidencia que ella tuviera el olor de un cazador impregnado en ella. Lo más probable es que estaban siguiendo a esa mujer —dijo Alexander, observando detenidamente a Thomas, quien asintió con la cabeza. —Jaime y yo llegamos a esa misma conclusión, su majestad. Quisieron enviarnos un mensaje. —Malditos cazadores... quiero aniquilarlos personalmente a todos —dijo Alexander, mostrando una sonrisa colmada de rabia. —Su majestad, no puede hacerlo. Son demasiados y nosotros cada vez somos menos. Solo qu