Como si la vida los guiara, destinándolos a permanecer juntos, esa noche luego de que Dilia y las muchachas del servicio abandonaran la habitación luego de haber organizado nuevamente los artículos personales de Peyton en el vestidor y en cada parte dónde estaban distribuidos en toda la habitación, las mujeres les dieron las buenas noches y salieron. Dilia fue la única que volvió para llevarle un té a Peyton y los medicamentos que le correspondían antes de dormir. Peyton se tomó el té y los medicamentos y por el efecto mismo de los síntomas del embarazo se quedó dormida inmediatamente comenzó a ver un programa de televisión al decidirse a ignorar a Orestes quién acostado a su lado, no dormía pero sí se mantenía revisando algo en su Tablet y al pendiente de todos sus movimientos. Otro de l