CAPÍTULO NUEVE Thor caminaba por la Tierra de los Druidas, sorprendido por su entorno, tan exótico y sin embargo tan extrañamente familiar. Atravesó un campo de flores, estiró la mano y las tocó asombrado, tratando de comprender dónde lo había visto antes, donde había visto antes todo este paisaje. Mientras más lo examinaba, más empezaba a recordar: era el campo de flores en el que ya había estado antes. Era el campo que estaba afuera de la Corte del Rey. El lugar donde había tenido su primera cita con Gwendolyn. Había sido un lugar mágico para él, un lugar grabado en su memoria, donde se había enamorado por primera vez. Un lugar que nunca podría olvidar. Pero, ¿qué podría posiblemente estar haciendo aquí, en la mitad del mundo, en la Tierra de los Druidas? ¿Había cruzado el mundo sólo p