"Policías y Criminales" |Yoonmin| |Namjin| |VHope|

"11" Un poco de información -1-

Namjoon estaba más que intrigado, estaba que podía sentir como la curiosidad lo mataba lentamente, pero aquella frase en su cabeza le hacía retroceder —La curiosidad mató al gato, recuérdalo Namjoon— se dijo a sí mismo y volvió a su escritorio, el cual se encontraba hecho un desastre de papeles, algunos en blanco otros con dibujos algo locos pero a su vez realistas. El agente se sorprendió al encontrar un dibujo en blanco y n***o de su jefe. Miro detalladamente y asombrado, eso era talento.

—Señor Monster! devuelveme mi hermoso dibujo— Namjoon alzó su cabeza y vista, el pequeñín reclamaba lo que era suyo... lo que era suyo. Su ceja se levantó curioso y dudoso —¿No me dará mi dibujo?— Chimchim frunció sus cejas y sus brazos se cruzaron —Se lo diré al jefe Min y..- dejo de "Amenzarlo" cuando su dibujo se le fue entregado.

—Dime algo... porque "Monster"? Y... ¿Tú dibujaste eso?—

Chimchim ladeo la cabeza y sonrió asintiendo a lo segundo preguntado, él lo sabía, tenía varios talentos pero lo que realmente amaba era danzar y lo amo mucho más desde que bailó para su jefe favorito, solo para él. Sonrió al recordar ese día y un leve sonrojo que colo en sus mejillas, mordió su labio inferior y salió corriendo, yendo directamente a saludar a su jefe Min. El agente Namjoon se quedó con otra incógnita, ¿Por qué Monster?. Removió su cabeza y se limitó a solo prestarle su atención a Pink Boy, criminal que era todo un reto. El agente no sabía nada de él, no sabía su nombre real, tampoco su verdadera edad, si tenía familia, del porqué estaba a cuidado de ese par. Kim Namjoon no sabía nada de Pink boy y eso, aunque no tenga sentido, no le hacía bien, pues él quería saber almenos que es lo que le gustaba aparte de ese rosa pálido.

—Solo quiero saber más de él...— murmuro sin dejar de observar al chico rosa en su celda, escribiendo un su bendita libreta —Que estará ocultando— El agente avioletado (por el tono de su pelo, el cual no tuvo el valor de cambiar) se vio pensativo, deductivo, demasiado concentrado, ignorando a todo y todos a su alrededor. Y el hecho de que Chimchim este revolviendo las hojas en su escritorio no le importo, pues, solo se concentraba en Pink boy.

—Jefe Min, lo encontré! mire, nos dibuje!— chilló el pequeño de pie en el escritorio de un concentrado agente.

Namjoon se puso de pie, yendo hacia esa celda, yendo hacia ese chico amante del rosa —Pink...— llamó, el criminal alzó su mirada y lo escaneo —Me gustaría saber de ti— el agente no se fue por las ramas, fue lo más directo posible, estaba urgido de información.

—¿Y porque la prisa?— lo miro serio —Se nota que está con prisa— Sonrió algo triunfante —Pero lo siento, no puedo hablar de mí—

—No trabajan solos, verdad?— preguntó "ignorando" —Dime si estas en aprietos, yo podría-

—No, estás equivocado, somos solo nosotros tres y bueno, Jackson es solo un cómplice amigo—

Namjoon sonrío ofendido, como podía mentirle en su cara, porque si, él sabía que Pink boy le estaba mintiendo; Sus movimientos, sus expresiones, cada diminuta acción que el chico hacia, Namjoon la deducía con rapidez. —No dejaré que te lastimen si están en aprietos—

—Ya te dije...- acallo por la seriedad en el rostro de agente —Realmente no deberías de preocuparte—

Namjoon sonrió e ingreso a la celda —¿Qué tanto escribes?— fue un cambio repentino para Pink boy, pero era mejor eso que verlo así de serio como hace unos segundos —¿No me dirás?—

—Son planes para escapar— confesó con sinceridad, el agente rió por un corto tiempo pero dejó de hacerlo cuando Pink le dejó ver su libreta, allí tenía escrito"Planes de escapes", enumerados —No soy una persona que suele mentir, no me agrada hacerlo—

—Gracias por la sinceridad— el pelivioleta leía con atención, algunas ideas eran de película y otras realmente daban miedo, como el del #N°12: Explotar la comisaría, aunque le sacó un sonría, pues era cosa imposible que se diera si no se tenía los elementos necesarios para armar una bomba improvisada. —¿Ves muchas películas?—

—Me gustan las de acción porque puedo robar ideas—

—Me doy cuenta, y... que más te gusta?— Ese era su plan, que de a poco a poco Pink boy le hablara de sus gustos, de él de manera inconsciente.

—Ehm... el chocolate blanco, me gusta tanto como el rosa— Mostró una pequeña sonrisa. El agente mientras se hacía una nota mentalmente.

—¿Y porque te gusta tanto el rosa?— Le entregó la libreta, el chico pensando que eso no iba a pasar la tomo con duda.

—El rosa... simplemente me gusta, no hay motivos, tampoco razones, solo me gusta—

Algo no iba bien, esa sonrisa desapareció del rostro de Pink, Namjoon pensó que era el momento de cambiar el tema, cosa que hacía drásticamente, asustando a algunos pero era algo suyo que hacía de manera inconsciente, no lo controlaba.

—¿Que te gustaría hacer ahora?—

Pink boy sonrió y guardó su libreta rosa debajo de su almohada —Ya que lo pregunta...—

...Una hora fue lo que duró el viaje, el chico rosa entró como si fuera su casa, de hecho, él fue el que abrió la puerta de esa casa, hogar del agente Kim Namjoon.

—¿Y porque tan insistente en querer venir a mi casa?—

—Para confirmar—

—Confirmar que exactamente?—

—El que no mentías acerca de no tener nada de valor. Y vaya que era cierto, eres aburrido— Y aunque haya dicho aquello, el se encontraba más que entretenido mirando con curiosidad algunas antigüedades, las cuales tenía idea y sabía que eran sin valor. —No te quiero ofender pero tienes pura basura antigua— Namjoon estuvo por reclamarle, pero... —Me gusta, y me gustaría más si le limpiaras de vez en cuando el polvo—

—Me sorprendes... y creo que todavía tendrán polvo, el trabajo es algo que no me deja en paz, además—

—No te gusta limpiar— completo Pink a lo que Namjoon asintió —Tal vez algún día te haga el favor—

—¿Cuando entres a mi casa a robar aprovecharas a limpiar también?—

—Esa es una pregunta muy tonta viniendo de un agente inteligente— rio y tomo un pequeño adorno echó de cera —¿Si te robo que limpiaría? si me llevo todo...— Dejó el objeto en su lugar —Tienes una hermosa casa agente Nam—

—Se me fue heredada por mi difunta abuela—

—¿Las antigüedades también?—

—Solo algunas, con ella compartíamos esa afición por el recolectar y conseguir antigüedades—

El chico sabía y se veía desde lejos que hablar de ese tema todavía lo entristecía. —¿Tienes algo de comer?, tengo hambre— Así que tuvo que cambiar el tema de esa manera rápida, Namjoon sonrió por eso y le ofreció seguirlo a la cocina, lugar increíblemente ordenado, como si nunca se usará.

—No suelo usar la cocina—

—En serio? no me había dado cuenta— Respondió sarcástico, causando su propia risa y la del contrario —¿Así que vives comiendo comida chatarra?—

—No exactamente...— Vio a Pink boy mirarlo con los ojos entrecerrados —Bueno, sí. Es eso, o quemo la casa—

—¿Así de malo eres?—

—Así y mucho más—

✒...

El comisario buscó con la mirada a su agente de cabellos locos, ese color lo había sorprendido, pero no era que estaba prohibido, no le dio importancia. Mostró sonrisa al no verlo, tampoco a cierto criminal rosa. ¿Por qué de su sonrisa?.

—Taehyung, ven un momento— Kim dejó su taza de café y se acercó a su jefe —Quiero que averigües si Namjoon está de nuestro lado, se discreto, no quiero que nos cause problemas y sabes bien que si algo sale mal, se los llevaran—

—No abran problemas, déjelo en mis manos—

—Así de habla agente— una palmada en el hombro y lo dejó volver al trabajo. Al girarse de inmediatamente una gran sonrisa se apoderó de sus labios. Chimchim lo esperaba con ese brillo en su mirada. Era hermoso. —¿Seguimos Chimchim?—

—Sí!—

—Bien, dime, a él, lo conoces?— le mostró la foto de un reciente criminal, Jimin ladeó su cabeza confuso —¿Eso es un no?—

—Es raro, creo que lo conozco pero esa marca en su mejilla es imposible que esté allí—

Min se mostró interesado —¿Por qué es imposible?—

—Él cuidaba mucho su rostro y compartía sus cremas con Hyung-Pink— dejó escapar una risita al recordar un hecho del pasado, donde él había ingresado a la habitación de su hyung sin avisar, allí los vio, con máscara en sus rostros, vaya susto se había llevado. —Se llama Heechul y es nuestro vecino. Él es muy gracioso y siempre me traía caramelos de miel, pero solo de miel— Puchereo.

—Gracias Chimchim, ¿estás cansado?— El pequeño nego —¿Seguimos entonces?—

—Sí! es divertido!— Sonrió, y el no tenia idea que esa sonrisa causaba efectos muy grandes en su jefe favorito.

...

El criminal de tonos rosas se sentía un 50% confundido, y los otros 50% eran la causa, confundido de felicidad. ¿Por qué su sonrisa no abandonaba sus labios? ¿Por qué el agente Namjoon hacía que su estómago se sintiera raro? ¿Por qué de su felicidad?, ¿el que haya pasado una agradable y divertida tarde con el agente era la causa?. Pink boy se sentía muy confundido.

—Nam, detén el auto— Pidió mirando al frente, sin siquiera mirar al conductor, en este caso a Namjoon —Rápido—. Los frenos fueron presionados y el vehículo tuvo un brusco detener. Pink boy abrió la puerta a su derecha y su estómago revuelto actuó con urgencia.

—Te advertí que no comieras muchas galletas, además te las comistes caliente— Le recordó Namjoon para luego ayudar al chico, sostuvo sus cabellos entrometidos y dio palmadas suaves en su espalda —Mejor?— pregunto una vez el chico dejo de vomitar en la acera. Pink boy se dio cuenta del porqué su estómago se sentía raro.

—Me siento mejor— dijo un vez su boca estuvo limpia. Namjoon nuevamente puso en marcha su auto. —En la próxima te escucharé—

—¿En la próxima?, ¿porque estás tan seguro de que habrá próxima?—

El criminal lo miro sonriente —No lo se, lo presiento— Le saco una sonrisa al agente.