YILEYNA Theon me había llevado al hospital y sin vergüenza había dicho al sanador que había tenido relaciones sexuales la noche anterior. Así que aquí estaba, con una taza de leche caliente mientras la sanadora Shayna me miraba. Se sentó al borde de la cama, con las manos sujetas, mostrando preocupación en sus cálidos ojos marrones. —¿Fue consensual? Según mi examen, parecía bastante... brutal. —Sí, lo fue —respondí rápidamente, sonrojándome por su pregunta. Ella asintió, su cabello rubio y rizado reboteando al hacerlo. —Bien. ¿Estás usando algún método anticonceptivo? —No... —¿Te gustaría un amuleto anticonceptivo? —preguntó. Esto era humillante... pero recuerdo a mamá decirme que cuando llegara el momento me asegurara de conseguir uno... —Um, sí por favor —dije, mirando fij