AL RITMO DE UNA PASION

2. Mozo, tráeme otra botella más.

Capítulo 2. Mozo, tráeme otra botella más.

Bella sale de la habitación corriendo, no puede mantenerse ahí. Los traicioneros y desgraciados solo le provocaban asco y nauseas. Ella llegó al lobby del hotel, las lágrimas en sus ojos comenzaban a cejarla, Bella pensaba que ahora no tenía a donde ir, el departamento donde vivía era el mismo que compartía con su prima Sofia y ella no quería volver ahí, salió del hotel y camino por la calle, vio un bar al final de la calle y me metió ahí, estaba oscuro y nadie podía darse cuenta de lo hermosa que estaba vestida, además por la hora muchos ya estaban pasados de copas. Ella se ubicó al fondo de este, donde estaba la parte más oscura y pidió una botella de alcohol, no le importa lo que sea, le dijo al mesero, cualquier cosa que sirva para hacerle olvidar un amor era bueno.

Bella lo bebió sin parar, un vaso, y luego otro y otro y otro más, se terminó toda la botella, y no sentía nada, todavía recordaba lo que había visto esa noche,

-- Mozo, tráeme otra botella más – le pidió,

-- Necesito olvidarme de todo, solo así me sentiré mejor – le dijo, y fue verdad, luego de terminarse la segunda botella logó olvidarse de todo.

Cuando Bella salió del bar ya eran cerca de las doce de la noche, ella estaba sola y completamente borracha, Bella caminaba por la mitad de la pista sin importarle nada, su cuerpo iba tambaleándose de un lado para otro, unas luces de un auto se acercaban a gran velocidad, pero ella no las veía, Bella continuaba caminando en zigzag en mitad del camino, de pronto el chofer del auto se dio cuenta de la mujer que caminaba de manera inestable en la pista, este piso el freno del auto para disminuir la velocidad, nunca se imaginó que a esta hora de la noche alguien caminara por ahí y menos a mitad de la pista, el auto patino y el sonido de los neumáticos paralizo a Bella, la luz brillante, el sonido de los frenos, y todo el alcohol que tenía adentro Bella la llevaron a la inconciencia. Cuando el chofer logró detener el vehículo estuvo a solo unos centímetros de ella, él hombre que estaba descansando en el asiento de atrás abrió los ojos por la abrupta maniobra de su chofer,

-- ¿Qué fue lo que paso? – pregunto un poco molesto, Paolo Milano

-- Disculpe señor Milano, una persona se atravesó en nuestro camino, pero estoy seguro de que no lo he tocado, seguro debe ser un chantajista, déjeme averiguar – le informa su chofer, Paolo Milano era un empresario multimillonario muy importante, él regresaba de la fiesta a la que fue invitado, llego un poco tarde y cuando lo hizo nunca pudo ver a la señorita Rossi, le pareció una falta de respeto que lo inviten a una fiesta de cumpleaños y que la dueña del mismo no se encuentre presente, estaba de mal humor, estaba cansado y no le gustaba que le cambien sus rutinas y esta detención era una de las tantas cosas que detestaba,

-- Apresúrate – es lo único que dice y cierra los ojos. El chofer baja del auto apresurado y se acerca a Bella, al hacerlo puede darse cuenta de que es una hermosa mujer la que esta tirada en la pista, su vestido es hermoso y ella se encuentra inconsciente, pero también logra sentir el fuerte olor a alcohol en ella, al mirarla bien se da cuenta que la ha visto antes, no está seguro donde, por lo maquillada que se encuentra, pero ese rostro le parece conocido,

-- Señorita por favor despierte, me puede escuchar – le dice y trata de moverla un poco con su mano, Bella no mueve un solo musculo, pero la luz del auto logra iluminar mejor a la muchacha y el chofer puede verla mucho mejor, él la reconoce en ese instante, ella era la muchacha del cumpleaños, la hija del fallecido señor Rossi, la mujer que su jefe no pudo ver esa noche, pero ¿cómo era posible que ella haya terminado en ese estado? Se preguntaba el chofer, él regreso al auto y le informó a su jefe,

-- Señor Milano, es la señorita Bella Rossi, la hija del difunto señor Rossi. La muchacha del cumpleaños, pero ella esta inconsciente tirada en la pista frente al auto, parece estar demasiado ebria – le informa el chofer, Paolo frunce el ceño, él recordaba a la hija de la familia Rossi como una chica dulce y encantadora, por eso había aceptado ir a su fiesta de cumpleaños número 21, además después de la muerte de sus padres él supo que ella estaba de novia con un hijo de la familia Franco, como era posible que ella este ebria y sola un día como este,

-- Que esperas para traerla al auto, ¿ella no es la novia de Mateo? Él tampoco estuvo en la fiesta esta noche – le pregunta el señor Milano, su chofer hace memoria y recuerda un segundo a Mateo y asiente, pero era extraño que ninguno de los dos haya estado presente cuando él llego al hotel,

-- Si señor, ella es la novia del joven Mateo, su sobrino segundo – le dice y vuelve hasta donde esta Bella, para levantarla y llevarla adentro del auto. El chofer cargo a Bella y la coloco al lado de Paolo, él espero la orden de su jefe para saber a dónde deberían ir en ese momento, Bella se sentía incomoda en la posición en la que estaba y abrió los ojos para quejarse, cuando se dio cuenta que estaba en un auto desconocido, Bella miro a su alrededor y vio a la persona que esperaba las órdenes para avanzar, luego volteo para ver quien estaba a su lado y pudo ver a Paolo, ella intentaba enfocar su mirada para saber quién era ese hombre,

-- ¿Quién eres tú? -- le pregunta y Paolo la ignora, el olor a alcohol le llega a la nariz y le provoca molestia, solo levanta la mirada hacia su chofer para darle la orden de a donde ir,

-- Vamos al departamento de Mateo – Bella escucha que la llevaran al departamento de Mateo y no puede permitirlo, ella estaba ebria, pero recordaba lo que ese desgraciado le había hecho,

-- No, donde Mateo no. Yo ya terminé con él, por favor no me lleves a donde ese bastardo – le dice.

-- Terminaste con él – repitió Paolo sin poder creerle,

-- Si, él me engaño. Él estaba en el hotel con mi prima, él me está engañando con esa puta, ellos son unos bastardos – le dice Bella y las lágrimas comienzan a correr por sus mejillas, ella se veía tan hermosa en ese momento, ella no se daba cuenta, pero Paolo estaba hipnotizado por ella, sin embargo, el hombre prefería hacerla pensar que la estaba ignorando, él no cambio la orden y Bella seguía hablando sobre el engaño de esa noche.

Bella se dio cuenta que el auto seguía el mismo camino, al parecer esa noche la dejarían en contra de su voluntad en el departamento de Mateo, así que Bella se molestó por la actitud del hombre, ella se acercó a él y lo miró fijamente, en ese momento logró reconocerlo, él era el tío lejano de Mateo y un amigo de su familia, ella lo había visto en el entierro de sus padres, él era Paolo Milano, ella lo tomo del cuello molesta, lo atrajo hacia ella y le grito muy cerca del oído,

-- ¿Acaso has escuchado lo que te he dicho? – Paolo que no estaba para aguantarla le aparto las manos de su cuello y la hizo caer sobre él, la cara de Bella callo sobre su entrepierna muy cerca de su hombría, cuando Bella abría la boca para respirar todo el aliento lo sentía muy claramente en sus partes íntimas Paolo, debido a la delgada tela de su pantalón, ahora ella estaba muy cómoda acostada sobre el regazo del hombre, pero Paolo estaba volviéndose loco,

-- Podrías levantarte, no te das cuenta de que las señoritas decentes no se echan así – le dice llamándole la atención, pero a ella eso no le importa, ella solo quiere escuchar que no la llevarían a donde Mateo, además este hombre era el tío lejano de él, Paolo debería ayudarla y debería darle una lección a ese sobrino detestable que tiene.