Los ojos de Harry estaban inyectados en sangre cuando arrojó su teléfono contra la pared, rompiéndolo en pedazos. Estuvo involucrado en varias actividades comerciales ilegales y logró pasar desapercibido durante años.
Sabía que vender a los hijos de Aaron era una mala idea. Su negocio podría quedar expuesto si algo saliera mal. Pero no podía permitir que Tessa se reuniera con Aaron por los niños.
La única razón por la que Tessa le dedicaba tanta atención a Aaron a pesar de lo mucho que la había lastimado en el pasado era porque tenían hijos juntos.
Como eran un obstáculo, decidió deshacerse de ellos para siempre. Esos eran los pensamientos de Harry mientras se bebía una botella entera de whisky.
Del otro lado, el ambiente era sombrío mientras esperaban noticias sobre el paradero de sus
