Es el único hombre con el que compartí mi cuerpo, la única persona que dejé entrar a mi espacio personal.
Más que como a un amigo. Es mi seguridad, mi refugio. El hombre en el que confío y sé que el siente lo mismo por mi, pero las cosas cambiaron un día.
Estábamos bien, seguíamos avanzando, todavía no habíamos hecho el amor, yo no estaba preparado con tantas palabras metidas en mi cabeza.
Siento que de todos los errores que cometí en mi relación con Pedro, además de no reconocer como se sentía el y que yo siento lo mismo, el no contarle mi pasado fue muy estúpido.
Pero es una persona tan linda y buena, con un sentido de lealtad y de ayuda a los débiles que hablarle de todo habría cambiado lo que en ese entonces era perfecto. Fingía que no era gay más allá de Pedro, vivia fingiendo que lo que hacía con él, que toda mi felicidad estaba en una burbuja con él solamente y si esa burbuja se rompía no sabía que iba a ser de mí. Pero ahora lo veo, veo como estaba tan seguro de él, de su presencia y de su apoyo que yo no le correspondía sus sentimientos. Me negaba a que pase a más que solos nuestros cuerpos conectados.
Tengo que hablar con él cuando regrese, contarle lo que viví de niño, lo que pasó con mi hermano.
Decirle lo tonto que me sentí al desestimar su declaración de amor esa noche.Decirle que no lo decía enserio por que estaba borracho fue estúpido, ambos sabíamos todo el amor que había entre nosotros, es más ni los chicos se sorprendieron al escucharlo, era obvio.
Lo que no fue obvio o esperado fue mi reacción, la forma en que lo trate a partir de ahí.
Cambié, después de romperle el corazón con mis palabras, me transforme en otro, un tipo desagradable, siempre enojado, mala onda, lo alejaba de mi pero lo buscaba cuando ya no podía más. Dentro de mi cuerpo ya no cabían las ganas de mantenerme cerca, veía lo feliz que se ponía cuando volvíamos a compartir tiempo juntos, jugando, leyendo, yo jugando con mi cuchillo mientras él, con ese cuerpo sexi limpiaba y ordenaba sus armas.
Después de esa noche, nuestros momentos fueron cada vez menos, pero cuando pensábamos lo mismo ambos lo notábamos, el trabajo seguía siendo perfecto, la casa nueva era otra cosa perfecta e hizo que dejemos de compartir departamento aunque, con el paso de los meses, terminamos viviendo los 4 juntos. El lugar era grande, cómodo, me distraje de él armando mi enfermeria/laboratorio, estudié, compré muchos equipos y cosas con las que todo médico y uno loco como yo querría tener.
Pero dentro de mi solo existía él, su presencia en la casa estaba en mi mente todo el día, como un GPS siempre lo encontraba, su voz tan perfecta siempre me relajaba, su pasión por sus armas siempre era acompañada por mi silencio en un sillón detrás suyo, su energía en los jueguitos siempre era competencia para la mía, que si bien me gustaba jugar lo hacía para verlo feliz y tenerlo cerca mío un rato.
Sé y lo supe, creo que siempre, que Pedro me daba mi espacio, me dejaba ser a mi ritmo, incluso después de su declaración él siguió pensando lo mejor para mí, aveces me daba bronca que parezca que se arrastraba para que yo le prestara atención, yo? Ese bastardo que lo trataba mal o lo ignoraba, por que iba a quererme a mi?
Nunca tuve la fuerza para decirle que se aleje de mi, por que apesar de todo y de lo egoísta que resultaría lo quería conmigo, ahí siempre a mi alcance.
Y era obvio lo que sucedería después, se cansaría de mí.
Primero llegaste tú, el dulce y sexi Sam. Que tiene a mi amigo babeando el suelo todo el día, y que rabia tengo dentro mío por no poder estar así de bien, como ustedes, con mi Pedro. Por mi propia mierda, mi pasado y mi cabeza.
Luego esos hermanos llenos de amor y formando una familia feliz, todos lograron hacer explotar a mi hermoso Pedro, lo hicieron querer cosas que no le demostré que le podía dar. Lo hicieron abrir los ojos. Ahora va a volver y me va a mandar a la mierda.
-Lo perdí Sam
Ya no me importa llorar adelante de este chico, le conté muchas cosas, me tomo desprevenido y comencé a hablar y el sólo me escuchó, sin interrumpir ni gritarme como lo hizo hace solo unas horas cuando peleamos en la cocina.
-bueno Kevin, entiendo todo, como tu familia siento mi deber estar presente y apoyar, a ambos en lo que sea que hagan con sus vidas. Yo te quiero Kevin, algún día si quieres me contarás que fue lo que te pasó, que te impide amar a Pedro libremente. Porque sabes que aquí ninguno te juzgaría jamás sea lo que sea. Pero si no me lo cuentas estará bien, mereces ser feliz, de la manera que elijas, por favor habla con él y trata de arreglar las cosas. No estás bien cariño, y él tampoco. Por favor llevan muchos años viviendo así, no es sano.
-gracias Sam, yo también te quiero. Perdóname por estar tan insoportable y desquitarme con ustedes así.
Con su mano guía mi cabeza sobre su pecho y nos acomodamos mejor, me duele mucho la cabeza y abrazarlo me hace sentir mejor.
-descansa un rato Kev, yo me quedo contigo