TIERRA MOJADA Y CHOCOLATE.

2363 Words
Era el día en que seria presentada ante la manada en sociedad, todos sabrían quien soy, que hago , quienes son mis padres, y mencionarían de que color es mi pelaje, ese es un gran problema, solo hay dos lobas blancas en la manada, la luna BETH Y YO. Solo espero que no me pidan que me trasforme delante de todos, y si lo hacen, me negare. Desperté algo estresada, estaba muy nerviosa, mi hermano ayer volvió a la academia, no estaría conmigo el dia de mi cumpleaños, eso me hace sentir triste, el a demas de ser mi hermano, tambien es mi mejor amigo. Es el único que me entiende y es el que me hace sentir bien con sus abrazos. Voy a extrañarlo mucho estos meses. Sali de la cama y desayune rapido, mi madre fue a trabajar y mi padre aun no había vuelto de su trabajo nocturno. Eso quiere decir que se quedo haciendo horas extras, lo bueno de esta noche es que oficialmente tambien podria trabajar. Lo haría por las tardes después de la universidad. Quería quitarse la tensión que cargaba, decidí salir a correr al bosque, es el lugar perfecto, nadie va ahí y en el caso de que alguien la vea, escaparía, era muy buena, mi hermano me había enseñado todo lo que sabia, no estare en peligro. PUEDO DEFENDERME SOLA PERFECTAMENTE. Mi corazon estaba mas agitado de lo normal, me sentia rara, alerta y eso no era bueno. Era el momento de salir, cargue mi mochila con una manzana, una botella de agua y ropa, si estaba de suficiente buen humor puede que nade en el rio. Sali de casa, era muy temprano aun como para ser vista por algún chismoso, corrí en dirección al bosque y cuando ya me había internado en su profundidad me dirigí al rio, estaba sudada y agitada, de haber corrido una carrera con mi hermano le habría ganado. Me quite la ropa y me transforme, quería atrapar alguna presa eso me tranquilizaba, ayudaba a olvidar cada pensamiento innecesario. Vi en el reflejo del agua a mi loba blanca, su pelaje largo y brillante es hermoso, una combinación perfecta con el color de mis ojos. Sali a correr, cada vez estaba mas alejada de la manada y de todo ser, yo me sentía libre, en paz, mis patas dejaban huellas en la tierra y la brisa en mi rostro. No entiendo por que las mujeres de la manada se pierden todo esto, conectar con la naturaleza, con nuestro lobo interior, es algo que nos completa, podría apostar que solo se transformaron pocas veces, es algo que podemos hacer a voluntad, nada que ver con los cuentos de los humanos, con luna llena y esas idioteces, no, hay veces que nuestro lobo quiere salir y correr, cazar, y dejarse ser, reprimirlo seria como tener un pájaro enjaulado, uno triste y sin ánimos de cantar, entregado a la muerte. Corrí, libre, hasta que sentí movimientos en unos arbustos altos, me oculte sin hacer ruido y senti el olor del conejo que se ocultaba temeroso. Corrí hacia el con la intención de cazarlo y llevarlo a casa pero un estúpido lobo n***o, del doble de mi tamaño también fue tras el, maldito infeliz, el animal escapo, el lobo se quedo mirándome enojado, mostrándome sus enormes dientes y colmillos, como si eso fuera asustarme, lo ignore, mostrándole mis dientes ante de partir también y luego Corrí hacia la dirección que había tomado el conejo y finalmente lo atrape, no sufrió, le rompi el cuello rápidamente. Al volver por el mismo camino el lobo n***o ya no estaba ahí, se había marchado, dejando un rastro en el aire que olía a tierra mojada y chocolate. Era agradable, nunca antes había sentido un olor así en ningún lobo, pero no dejaba de ser extraño. Llegue al rio donde deje mis cosas, no volvería a casa apestando a sangre y toda sudada, volvi a mi forma humana y me adentre al agua sumergiéndome en la profundidad lo mas que podia, nada me relajaba mas que nadar en el agua fresca del rio. Si pudiera lo haria mas seguido, pero no tengo mucho tiempo para disfrutar de estas cosas. Eran casi las once de la mañana, el sol ya estaba próximo a alcanzar su punto máximo en el cielo y era hora de regresar, madre se volverá loca si no me encuentra en casa para prepararme para la estúpida fiesta de esta noche. En el aire podía sentir el aroma a tierra mojada y chocolate, como si se hubiera instalado en mi nariz hasta que llegue a lo limites de la manada, despues de eso ya deje de percibirlo. Deje el conejo sobre la mesada de la cocina, mi padre se ocuparía de limpiarlo, sabe cuanto amo el conejo en estofado, y el solo lo hace para mi. Nadie en casa aun. ¿Donde estaban? Me tome un momento para darme una ducha y para secar mi cabello, hoy al ser un dia humedo se formaban rizos rebeldes, imposibles de domar. Mi madre tendrá mucho trabajo con el. Una hora después mis padres habían regresado juntos, algo que también era extraño, ya que los dos tienen horarios laborales diferentes. __ ¿Dónde esta mi princesa? El grito de su padre resonó alegremente en el aire, acompañado por el vibrante color rojo de las rosas que sostenía en sus manos. Lily pudo percibir la emoción en la voz de su padre antes incluso de verlo. Su sonrisa, iluminada por la felicidad, era contagiosa, y ella no pudo evitar devolverle la sonrisa al instante. Las rosas rojas, símbolo de amor y pasión, contrastaban perfectamente con la apacible atmósfera de su hogar, llenándola de un aura de cariño y celebración. Era evidente que su padre estaba emocionado por el día especial de su hija, y esa emoción era palpable en cada uno de sus gestos y palabras. __ Muchas gracias, no debieron gastar en estas cosas, con que me hicieran un estofado de conejo bastaba. __ Madre, vio el animal sobre la mesada y arrugo su frente, como de costumbre. La madre de Lily observó el conejo sobre la mesada con una mueca de desaprobación, como si el simple hecho de verlo allí arrugara su frente automáticamente. Era una expresión que Lily conocía muy bien, una mezcla de preocupación y disgusto que su madre solía mostrar ante cualquier cosa que considerara fuera de lo común o no del todo apropiada. A pesar de su gesto, no pudo evitar sentir el cariño y la preocupación detrás de esa mirada. Era evidente que, para su madre, el bienestar de su familia era lo más importante, incluso si eso significaba mostrar desaprobación ante ciertas decisiones o acciones. __ ¿De donde lo sacaste? no habrás ... El ceño fruncido de su madre profundizó cuando mencionó el conejo, como si sus pensamientos ya estuvieran adivinando lo que Lily diría a continuación. Lily trató de explicar con calma, anticipando cualquier reacción excesiva por parte de su madre. Su explicación fue una mezcla de razón y justificación, tratando de calmar las preocupaciones que podría tener su madre sobre la caza del conejo. Sin embargo, sabía que su madre siempre tendría esa preocupación maternal, incluso por cosas tan aparentemente simples como la caza de un animal para la comida. __ Lo atrape yo misma esta mañana en el bosque, no hagas un drama, mi loba pedía salir y yo estoy nerviosa por lo de esta noche, vi el conejo y lo traje para el almuerzo de mañana. No es para tanto. __ Nunca vimos a tu loba, deberías mostrarnos algún día el color de tu pelaje ¿es gris como yo o marrón como tu madre? Recuerdo cuando la vi por primera vez y sentí su aroma casi me vuelvo loco, sabia que ella era mía, solo mia, nos enamoramos al instante.__ El le sonreía a mi madre, el recuerdo de cuando conocio a su pareja destinada hacia brillar sus ojos verdes aun mas. El comentario de su padre trajo consigo un brillo nostálgico a sus ojos verdes, como si estuviera reviviendo el momento en que conoció a su pareja destinada. Mientras sonreía a su madre, sus palabras parecían transportarlo de nuevo a ese instante, cuando el aroma y la presencia de su compañera lo envolvieron en un hechizo imposible de resistir. La mención de la loba de Lily trajo a colación una curiosidad genuina por parte de su padre, quien, intrigado por el misterio del color de su pelaje, sugirió que algún día debería mostrarlo. Era una invitación disfrazada de interés, una muestra de apoyo y conexión familiar, aunque la nostalgia del recuerdo aún jugaba en sus ojos. __ SOY UNA LOBA BLANCA. Lily rompió el silencio con una afirmación que resonó en la cocina, revelando un secreto que había mantenido oculto por demasiado tiempo. La sorpresa se reflejó en los rostros de sus padres, sus expresiones mezcladas entre incredulidad y comprensión. Para Lily, la revelación era liberadora; ya no tendría que ocultar su verdadera naturaleza, su identidad como una loba blanca en una manada donde tales criaturas eran extremadamente raras y, a menudo, consideradas de linajes nobles. Era como si un peso se hubiera levantado de sus hombros, aunque el ambiente en la cocina se volvió tenso ante la impactante revelación. __ ¡IMPOSIBLE! LOS LOBOS BLANCOS SON MUY POCOS Y TODOS PERTENECEN A UNA LINEA DE SANGRE REAL, NO SOMOS DE LA REALEZA Y DUDO MUCHO QUE NOS HAYAN OCULTADO SEMEJANTE INFORMACION. El padre de Lily respondió con incredulidad y preocupación ante la revelación de su hija. La idea de que pertenecieran a una línea de sangre real era desconcertante para él, especialmente porque nunca se les había informado sobre ese posible linaje. Sus palabras reflejaban una mezcla de inquietud y escepticismo, cuestionando cómo una verdad tan importante podría haber sido ocultada de ellos. La tensión en la cocina se intensificó con cada palabra, dejando a Lily preguntándose qué repercusiones tendría su confesión. __ Amor, de hecho, nunca te lo dije, pero mi familia es descendiente del antiguo reino del territorio central, de donde vengo, no creí que el antiguo linaje se manifestara en nuestra hija. __ Estaba tensa, preocupada y bajo su mirada, avergonzada por haberle ocultado semejante verdad a su esposo. Las palabras de la madre de Lily añadieron un nuevo nivel de tensión a la conversación. Su confesión revelaba un secreto guardado durante mucho tiempo, uno que ahora se desvelaba en medio de la preparación para la presentación de Lily ante la manada. La vergüenza y la preocupación eran palpables en su tono, sugiriendo que la revelación de su linaje ancestral estaba cargada de complicaciones y emociones reprimidas. La atmósfera en la cocina se volvió aún más densa mientras la familia procesaba la revelación. __ No hagan un escandalo de esto, debo prepararme para la fiesta de esta noche, el color de mi piel no es importante, aquí las lobas no lo muestran jamás, estare bien, todos lo estaremos__ Bese a mi padre para que deje de preocuparse y subí a mi habitación. Detrás de mi venia madre preocupada. Lily intentó restar importancia a la situación, tratando de desviar la atención de la revelación sobre su linaje y su pelaje blanco. Su deseo de evitar un escándalo sugiere que temía las posibles repercusiones de revelar demasiado antes de su presentación oficial ante la manada. Intentó tranquilizar a sus padres y a sí misma, enfocándose en la fiesta que se avecinaba esa noche y reiterando su determinación de manejar la situación con gracia y confianza. __ Hija, sobre tu pelaje, debes saber que... Lily interrumpió a su madre, anticipando lo que estaba a punto de decir. Era evidente que su madre quería abordar el tema del pelaje de Lily, pero ella estaba decidida a evitar cualquier discusión sobre ese asunto en ese momento. __ Madre, los se todo, tuve muchos años para investigar, se que hay lobos blancos, que ellos descienden de familias reales, lo que no se es de quien lo herede. Lily respondió con determinación, mostrando que había investigado y reflexionado sobre el tema del pelaje blanco. Su tono indicaba que estaba bien informada y que estaba preparada para cualquier discusión que pudiera surgir al respecto. __ De mi madre, ella era una loba blanca también. __ Dijo su madre con tristeza Las palabras de su madre resonaron en la habitación, cargadas de una tristeza que no pasó desapercibida para Lily. La revelación añadió una capa de complejidad emocional a la situación, dejando en claro que había más historia detrás del pelaje blanco de Lily de lo que ella misma había imaginado. __ Ok, hablaremos de esto mañana, ahora se hace tarde y debes domar estos rizos. Con un asentimiento, Lily aceptó el aplazamiento de la conversación, aunque sabía que el tema seguiría pesando en sus pensamientos. Decidió desviar su atención hacia el presente y asintió ante la sugerencia de su madre, reconociendo que los preparativos para la fiesta requerían su atención inmediata. Unas horas después ya estaba lista, madre había elegido un peinado recogido, pero que caía de costado sobre mi hombro descubierto, mi maquillaje era natural, sencillo, nunca necesite de estas cosas para verme bien, estaba feliz con mi aspecto. Mi padre me tomo fotografías en el jardín, sus flores estaban hermosas y luego de despedirme de mi madre, me llevo en el auto a la casa de la manada. Al llegar, el bajo del vehículo para dar la vuelta y así ayudarme a bajar. Me entrego un pequeño bolso que hacia juego con mi vestido, y dijo que dentro de el estaba su regalo por mi cumpleaños. Un lindo teléfono celular. Agradecí el detalle y nos acercamos a las puertas de la casa de la manada, un hombre tenia una tableta y me pregunto el nombre, como sabiamos que pasaría, solo se me permitía ingresar a mi sola. __ Estaré bien, te llamare para que regreses por mi. Te amo papi. __ Lo abrace y despues de unos segundos nos apartamos. El beso mi frente y luego me encamine hacia las escaleras que llevan a la puerta principal.
Free reading for new users
Scan code to download app
Facebookexpand_more
  • author-avatar
    Writer
  • chap_listContents
  • likeADD