Narra Henry Leyla finalmente salió del baño a las 7:45 pm. Su cabello rubio estaba recogido en un moño colocado en la parte posterior de su cabeza. Su maquillaje fue impecable. Quería atacar esos labios rojo cereza. —Ven aquí. Subiré la cremallera de la parte de atrás de tu vestido— se paró frente a mí en el espejo—.Tengo algo para ti—saqué la caja roja de la mesita de noche. En el interior descansaban tres pulseras de plata con incrustaciones de diamantes. Se los compré a una diseñadora de joyas privada. —Son hermosas, pero puedo aceptarlos—deslicé las pulseras en su muñeca, mientras ella protestaba. Le di la vuelta en mis brazos, tomándonos una foto. — Nos vemos hermosos juntos—dije, ella finalmente no siguió protestando. Poco después salimos Evan nos recibió en la entrada principa