Capítulo 6
No te atrevas a morir pacíficamente
Cuando escuché esas palabras salir de esa pervertida boca; aunque lo intenté, no pude evitar reírme a carcajadas mientras miraba como se apretaba el pecho con aparente desesperación y su rostro iba cambiando de su color blanco natural a un extraño carmesí.
Detuve abruptamente mi momento de diversión y levanté las cejas, estaba realmente asombrada de poder ver a Demian con ese aspecto tan deplorable antes de mi muerte; sin embargo, me obligué a salir de mi asombro cuando me volvió a gritar.
“Cassie, por favor llama la ambulancia, o sal al lobby a recibir atención médica y déjame aquí; no me importa morir, pero no es necesario que acabes con tu vida así, por favor, no lo hagas por mi”
Me dijo con su voz muy baja y yo definitivamente me sentí muy cómoda al escuchar sus últimas palabras suplicándome, aunque siempre había deseado verlo arrodillado ante mí, humillado como él tantas veces me ha tenido frente a él; hubo algo que hizo clic en mi cerebro de inmediato; pues, Demian que siempre ha sido arrogante y agresivo, en este momento tenía las rodillas y las palmas de sus manos apoyadas en el suelo, lo más importante es que esta justamente junto al jacuzzi, ¡a mi lado!, es decir, si él quisiera atacarme lo pudo haber hecho antes de desplomarse.
No puedo olvidar que, en realidad, este tipo es un buen actor, así que no puedo estar segura de que me esté mintiendo o no; pero, solo con verlo de esa manera y pensar que repentinamente podía morir tan tranquilamente en este lugar, ¡y acompañarme en la muerte! salí con un brinco del jacuzzi cubriendo mi herida sangrienta con una mano y caminando lo más lejos posible de este cabrón, en este momento crucial no me puedo dar el lujo de caer en otro de sus trucos sucios.
Mientras caminaba hacia la sala de estar, luchando con el mareo repentino causado por la pérdida de sangre, pensaba en todas las posibilidades que tengo en este momento, y llegué a la conclusión de que, no importa lo que ocurra conmigo; mi única prioridad en este momento es que Demian no puede morir de esta manera, el destino no puede ser tan cruel de darle una muerte natural y pacífica a una basura como esta.
Soy totalmente consciente de que; si en realidad se trata de una trampa de su parte, sin necesidad de drenar toda mi sangre delante de él, sin duda alguna hoy será el último día que pueda respirar, según mi comprensión de esta bestia, definitivamente me querrá hacer pagar por mi insolencia de haber querido separarme de su tortura usando la muerte; sin embargo, ya me siento aliviada solo por verlo de esa forma tan miserable delante de mí, así que a partir de este momento; todo lo que haga, incluso si me mata con sus propias manos mientras me viola en esa asquerosa cama donde se ha follado a todas las mujeres facilonas de florida, puedo vivir feliz en el infierno porque habrá valido la pena.
Después de una corta consideración, detuve mis pasos y con toda la valentía y cautela que pude reunir cambié mi dirección y me acerqué a él; apoyándome en la pared pude sentarme en el wáter, e inclinarme para colocar mi dedo índice debajo de su nariz.
Aunque no soy médico pude sentir que, si bien se está esforzando para soportar el dolor en el pecho, su respiración ahora es mucho más débil.
De inmediato entre en pánico, sentí que además este maldito mareo que no me permitía caminar, mi cuerpo estaba cada vez más débil y tembloroso; pero, se bien que no puedo desmayarme ahora,
¡nooo! Este maldito no puede morir tan pacíficamente…
Usando todas las fuerzas que pude reunir e ignorando totalmente que mi cuello también sangraba, me sostuve de nuevo de la pared y caminé lo más rápido que pude, dejando una larga mancha de sangre por donde pasaba.
Finalmente llegue a la sala de estar y me desplomé en el sofá donde hace menos de una hora, mi única preocupación era que podía morir… descartando la ironía de mi situación actual; tomé el teléfono y llamé al lobby, sin vacilar; como dueña legitima de este basurero de siete estrellas le exigí a la recepcionista que hiciera venir de inmediato al médico del hotel, y además llamé a la ambulancia lo más pronto posible.
Aunque toda mi atención estaba puesta en el bastardo que hace un segundo había caído acostado en el suelo del sanitario, logre escuchar la vacilación de la recepcionista cuando me preguntó
“lo siento señora Lemez, ¿la urgencia es suya o del presidente?
Je, no pude evitar reírme… este es el resultado que obtengo de ser una esposa totalmente nominal, que solo sirve como saco de boxeo.
Intentando no enojarme demasiado le respondí
“eso no debería ser asunto tuyo, cumple con tu trabajo que para eso se te paga”
Después de decirle esas palabras colgué, ya mi visión se estaba oscureciendo; pero logré ver mi bolso junto a mí, cuando lo abrí para sacar una venda que me acababa de retirar en la mañana escuché la voz masculina que provenía del sanitario
“no te asustes cariño, en realidad durante estos dos años te he hecho demasiado daño y es justo que muera si eso te hace sentir mejor”
Aunque puedo sentir que cada vez estoy más débil, me rehúso a morir con este asesino… lo miré débilmente acostado boca arriba en el suelo, él también me miraba así que le sonreí antes de responderle
“Demian; he decidido renunciar a la muerte en este momento únicamente porque no puedo permitir que mueras de esta manera, es demasiado injusto que Dios te permita largarte así, por una causa natural tranquilamente acostado en una cama de hospital; solo me asusta que no puedas vivir lo suficiente para sufrir como yo he sufrido en tus manos”
Le dije sin ocultar todo el odio que siento por él; sin embargo, contrario a lo que pensaba, en respuesta me sonrió débilmente.